El vicepresidente del Gobierno de Navarra, Javier Ramírez (PSN), ha mostrado su admiración ante el racismo y xenofobia del PNV, partido que busca la desaparición de Navarra y que ha protegido y cuidado durante años a los terroristas de ETA.
El socialista navarro se ha quitado ya las caretas y ha mostrado la hoja de ruta del PSN, una alianza descarada con el nacionalismo vasco para repartirse el poder en País Vasco y Navarra entre los racistas vascos y los socialistas, con Bildu como testigo del enlace.
"Aitor Esteban nos representó a todos los que no vamos a admitir una involución democrática", ha dicho el socialista que acepta y legitima los votos de los proetarras de Bildu en Navarra para asegurarse su sillón al frente del Gobierno foral.
Hay que recordar que el PSN navarro ha negociado y pactado a escondidas de los ciudadanos con Bildu su llegada al poder al frente del Gobierno foral, para después entregarles todo el poder posible a los proetarras en instituciones y consistorios de Navarra, como la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, la Federación de Municipios y Concejos, el consistorio de Huarte o Viana.
"Si hay algo hay en común en la historia del PSOE y PNV es ese compromiso democrático. Mi cariño y solidaridad, amigos jeltzales", ha dicho todo un vicepresidente del Gobierno de Navarra, arrodillado ya a la al partido nacionalista que negoció con Hitler la independencia del País Vasco y que reconoció recoger las nueces que dejaban los disparos de los asesinos de ETA entre la sangre de casi mil asesinados.
El comentario de Remírez en redes sociales llega por un debate político en La Sexta en el que el partido racista fundado por el misógino Sabino Arana, que sigue siendo todo un referente para los nacionalistas vascos del PNV, fue criticado por VOX, que insinúo que sería ilegalizado si ellos pudieran.
Remírez ha salido rápidamente a proteger a sus principales socios de Gobierno en Navarra, el PNV de Uxue Barkos, que es quién dirige en realidad la política del Ejecutivo foral, como ha quedado demostrado en todas las decisiones hasta la fecha, como el IRPF de las madres, la paralización del modelo PAI o proseguir con la política de imposición del euskera en Navarra.
En su intervención en el debate televisivo, Aitor Esteban aseguraba que el PNV siempre había estado del lado de la democracia, olvidando el pasado negro y oscuro de su formación, siempre del lado del totalitarismo, primero con los nazis y después con ETA.
Cuando Herri Batasuna y ETA había sido prácticamente derrotada por los ciudadanos, el PNV de Aitor Esteban propició el Pacto de Lizarra para salvar a los terroristas y dar el aliento que necesitaba la serpiente asesina para proseguir con su odio y terror en Navarra, algo que Javier Remírez ahora admira y aplaude.
De la misma manera, el PNV mantiene la Fundación Sabino Arana como referencia de sus políticas aún hoy en 2019, donde se dice que los españoles son inferiores a los vascos y que las mujeres no tienen capacidades.
Hay que recordar que María Chivite ha incorporado a su gobierno como consejera y como director general a dos ex parlamentarios de Herri Batasuna y Euskal Herritarrok, que militaron en los partidos en la época de los años de plomo.
Desde hace unas semanas, los socialistas han comenzado también una descarada campaña de insultos y descalificativos contra el partido más votado de Navarra, con insultos a sus parlamentarios y a sus líderes, todo para tratar de tapar sus pactos con el nacionalismo vasco más radical.
A continuación repasamos algunas de las frases de Sabino Arana, personaje al que todavía en 2019 el PNV idolatra y sobre el que cimenta todavía sus políticas.
Javier Remírez, vicepresidente del Gobierno de Navarra de María Chivite ha mostrado su admiración y señala este racismo y misogina del PNV como el ejemplo a seguir a partir de ahora.
