La Policía Nacional ha detenido a los integrantes de un grupo criminal subsahariano por un delito de obstrucción a la justicia.
Agentes de la Policía Nacional de Navarra han desarticulado un grupo criminal procedente de países subsaharianos como presuntos autores de un delito de obstrucción a la justicia por amenazar y coaccionar a testigos en procedimientos penales por trata de seres humanos con fines de explotación sexual, entre quienes se encuentran incluso menores de edad, procedentes de países africanos.
El origen del caso se remonta a varios años atrás, cuando se desarticuló en diferentes provincias españolas un grupo organizado que se dedicaba a traficar con mujeres desde África hacia ciertos países europeos para obligarles a ejercer la prostitución.
La operación estuvo encabezada por la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Navarra, que se ha encargado de ejecutar estas nuevas detenciones.
La organización desmontada inicialmente tenía carácter internacional y operaba desde diferentes países africanos. Trasladaba a las mujeres desde sus países de origen por el desierto del Sahara e incluso por zonas en conflicto de Libia para finalmente realizar una penosa travesía por el Mediterráneo en embarcaciones de tipo patera.
"Las víctimas padecían un elevado riesgo para su integridad física", ha destacado la Policía Nacional en un comunicado.
Dentro de las víctimas liberadas en esta operación se encontraban varias menores de edad, que se han visto obligadas a seguir durante estos años un largo proceso de reestablecimiento físico y psíquico que ha resultado complejo por la necesidad de mantener su protección ante posibles represalias.
De hecho, parte del grupo criminal ya comenzó a amenazar y amedrentar tanto a las menores como a su entorno familiar con el único fin de que no testificasen en los juicios.
Ahora la Policía Nacional de Navarra ha detenido a los autores de estas amenazas, que se enfrentan a un delito de obstrucción a la justicia.
