Desde que desapareciera el pasado 24 de noviembre, la cachorra Txiki llevaba más de veinte días sin ningún tipo de atención cuando finalmente falleció por inanición.
Aquel día había salido a pasear con su dueña, Ana, cuando en un momento dado salió huyendo tras asustarse de un coche. Después de cruzar el pueblo y pasar por las vías del tren, Txiki llegó hasta el Aeropuerto de Noáin, donde se metió en busca de refugio.
Sin embargo, desde ese momento y durante veinte días Txiki estuvo sin alimentarse hasta que el pasado 13 de diciembre su dueña recibió una llamada alertando de que la perra había muerto.
"Lo peor es que se podría haber evitado", explica ahora Ana en Onda Cero. Cuenta que llamó a la Policía Local, a la Nacional, al SEPRONA, puso carteles por la zona donde se la vio por última vez.
Tras varias semanas de búsqueda, fue la Guardia Civil la que se puso en contacto con ella para trasladarle la triste noticia: su perrita había aparecido muerta en el Aeropuerto de Noáin.
Ana también ha contado como cuando fue a recoger a su perra, esta era "un saco de huesos envuelto en un pellejo" y que Txiki aguantó tanto debido al temporal de lluvia que le permitió poder beber el agua "que le caí encima".
En su intervención en Onda Cero, Ana ha denunciado también los fallos de los protocolos del aeropuerto argumentando que "es una vergüenza" que nadie la llamara para rescatar al perro, ya que "todo el mundo sabía que yo la estaba buscando". Ha asegurado también que las vallas que rodean el aeropuerto "no impiden la entrada de animales" y que si los protocolos no facilitan el rescate de estos animales se debería hacer algo para evitar que entren.
