• viernes, 29 de marzo de 2024
  • Actualizado 11:00

Blog / Caracteres con espacios

No se lo cuentes a nadie

Por Juan Iribas

Carla pregunta "¿te puedo contar un secreto?"

Cuchicheo contado al oído RTVE
Cuchicheo contado al oído. RTVE

-¿Me estás ofendiendo? Por lo que más quieras… Nuestras madres iban juntas a las clases de preparación para el parto. ¡Soy una tumba!

-Me separo. Lo que no puede ser, no puede ser y, además, es imposible.

Carla y Nuria, su amiga del alma, se abrazaron mientras una fina lluvia quiso acompañarlas

-No llores.

-¡Cómo no voy a llorar! Es un fracaso… Una dice en el altar “sí, quiero”.

-...

-Sólo lo sabemos tú y yo. Mañana se lo diré a Edu e iremos pronto al abogado. No se lo cuentes a nadie. ¡A nadie, eh!

-Nuria, tú y yo no nos hemos visto…

-Gracias, Carla.

-Hablamos, que me espera un cliente; es la octava vez que suena este dichoso iPhone. Quedamos para cenar esta noche, ¿te parece?

Se abrazaron. Como si se tratara del The End de una comedia romántica. Sólo faltaba la banda sonora.

 -Hasta luego, hablamos, insistió Carla, gesticulando al levantar los dedos pulgar  y meñique.

-Hola, soy Carla.

-Mi vida, ¿qué tal?

-¡Alfonso!, qué pena…, sollozó Carla.

-¿Qué pasa?

-¿Te puedo contar un secreto?

-Carla, empezamos a salir a los catorce años. Tenía voz de pito, granos; era imberbe. Han pasado veinte años. Vas a dar a luz a nuestro tercer hijo…

-Alfonso: Nuria y Edu se separan

-Madre mía… ¿Se puede saber el motivo?

-Ni idea; he quedado con ella para cenar. Aparentemente todo iba bien. Recuerda: no se lo cuentes a nadie.

-Carla, por favor…

-Bueno, que tengo un cliente y he de atenderlo. Alfonso, te quiero.

-Juanma, ¿cómo te va?

-De lujo, Alfonso. Ya he terminado la rehabilitación. La pierna está como para un partidito.

-¿Un pádel? Juanma, Juanma… La última vez que jugamos…

-Sí, la fisura, sí. Ya sabes que voy a muerte a todas las jugadas, a tumba abierta.

-Por cierto, ¿serías capaz de ser una tumba?

Juanma gesticuló. Presionó los labios con su pulgar y su índice.

-¿Te acuerdas de Edu?

-¿Eduardo? ¿El rubio o el calvo?

-No se lo cuentes a nadie, eh. El rubio.

-Te comenté en la guardería que me gustaba la señorita. Desde entonces tenemos confianza.

-Edu se separa de Nuria. Bueno, creo que Nuria de él. El caso es que rompen.

-Nuria es la hija del notario, ¿verdad, Alfonso?

-Carla está hecha polvo. Sí. Van a cenar juntas. Mañana irá al abogado. Edu no lo sabe aún…

-¿Tú tienes que ser Juanma Olávarri?

-Y tú, Edu. Ya puedes perdonar, pero siempre te he llamado El rubio.

-¿Cómo te va la vida? Alfonso me habló de no sé qué lesión. ¿Jugando a tenis?

-Pádel.

-¿Y cómo te encuentras?

-Bien. Podría disputar un partido ahora mismo.

-Eso es una muy buena noticia. ¡Me alegro!

-Te puedo contar otra, sí.

-Soy todo oídos.

-Es que no debo…

-Juanma, Alfonso es nuestro amigo común. Los amigos de mis amigos son mis amigos.

-Vale, pero con una condición, Edu: no se lo cuentes a nadie.

Ideación de ‘No se lo cuentes a nadie’

El otro día me contaron varias personas un mismo secreto inconfesable.

Caracteres con espacios: 2.864

  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
No se lo cuentes a nadie