- miércoles, 04 de diciembre de 2024
- Actualizado 19:52
Pensábamos que era una payasada. Cuando vimos a los concejales transfúgas acudir al Ayuntamiento de Estella adornados con mascarilla y menospreciando todas las normas del confinamiento dictadas precisamente para proteger a la población a la que ellos precisamente estaban perjudicando.
Creímos que se trataba de una bufonada más. Una bufonada que da la talla del despreciable chanchullo político puesto en marcha por los partidos de Araiz y Barkos en compañía de los tránsfugas para hacerse con una Alcaldía que los ciudadanos de Estella les habían negado.
Pero no. A pesar de la ridícula puesta en escena, estos sujetos eran plenamente conscientes de lo que hacían.
Acudían así a sabiendas de que se estaban saltando la ley y poniendo grave riesgo de contagio a la gente de la ciudad y en particular a los empleados municipales que hubieron de tener contacto para que estos graciosos en compañía de los concejales de Bildu y Geroa pudiesen culminar su hazaña en la mañana del martes 24 de marzo.
Navarra.com nos destapó la noticia según la cual una de las dos concejales tránsfugas rompió su deber de aislamiento por síntomas evidentes de coronavirus salió a la calle para algo tan urgente como traicionar su compromiso con los votantes para elegir a un representante de Bildu como Alcalde.
Supimos también que un médico tuvo que denunciar la grave ilegalidad que de forma consciente estaba maquinando la concejala tránsfuga y hemos sabido que Policía Foral ha abierto diligencias por presunta conducta delictiva.
Un posible delito, una manifiesta conducta ilegal y un claro conocimiento de perjudicar la salud de los ciudadanos de Estella por una terrible pandemia por la que están muriendo personas,han sido los siniestros mecanismos sobre los que se ha apoyado esta moción de censura en su fase de ejecución.
No caben más elementos concurrentes en este despreciable disparate ….o sí, si atendemos a las mezquinas excusas con tintes de burda coartada que han expuesto las “diseñadoras” de esta operación que son a la postre quienes han autorizado y posibilitado todo.
Para Barkos, esta moción con concurrencia de tránsfugas en plena cuarentena, es culpa cómo no de Navarra suma por no posibilitar “un pleno telemático” tal y como “recomendaba el Gobierno de Navarra” para elegir al bildutarra en pleno confinamiento.
Además de extravagante y cínico, tal pretexto es deliberadamente falso de toda falsedad. No consta ninguna recomendación ni acuerdo oficial del Gobierno de Navarra en tal sentido. Y no consta porque no lo podía hacer y no consta porque si alguna recomendación (no oficial ) hubo fue dirigida a la conveniencia de aplazar el pleno hasta superar el confinamiento debido a la pandemia.
La otra responsable última de la barbaridad, Bakartxo Ruiz por su cuenta optó como en el cine negro por intentar “colgarle el muerto al mayordomo” y para procurar eludir su autoría arguyó que fue el secretario de la Corporación quien obligó a celebrar el pleno en semejantes circunstancias. Falso también pues a cualquiera se le alcanza que son los ediles quienes deciden hacerlo en esas fechas “de nocturnidad por pandemia” pues los plazos administrativos se encuentran paralizados y era posible y obligado el aplazamiento.
Por último queda el papel de la autoridad en esta materia. El control de legalidad de los actos de los Ayuntamientos corresponde al Departamento de Administración local del Gobierno de Chivite que bien debería haber dictado las disposiciones oportunas para evitar el desaguisado.
Claro pero Barkos autoriza y posibilita la tropelía en Estella y a la vez su formación forma parte del gobierno de Chivite y Bakartxo Ruiz posibilitó tal gobierno y es su indispensable socio presupuestario.
Acuerdo entre diferentes…. Y unos tránsfugas que en su patética ejecutoria exhiben como justificación ser unos discípulos aventajados de quienes hoy dirigen el PSN.