Estos últimos días el debate ha estado en primera línea en todos los medios de comunicación por la entrada en Australia del tenista serbio Novak Djokovic, actual número 1 del ranking mundial, para disputar el primer Grand Slam de la temporada. A su llegada al aeropuerto fue retenido por no aportar el pasaporte covid y, a pesar de contar con un certificado que acreditaba que había pasado el virus y estaba sano, fue retenido y mandado deportar. Tras el recurso presentado por sus abogados, intervino la justicia y dio la razón al tenista serbio, pero dos días después, de nuevo el Poder Político desoyendo lo que dos días antes había dictaminado la justicia, ha vuelto a detenerle y ordenar de nuevo su deportación. Los abogados del tenista han presentado otro recurso a la justicia pero finalmente el número 1 mundial ha sido expulsado del país por no estar en posesión del Pasaporte Covid.
Pero esta medida que ha aprobado el Gobierno Australiano y, qué vamos a analizar sí es justa y tiene sentido o si por el contrario es irracional e inmoral, está presente también en los principales países occidentales, entre ellos España. Todos somos conscientes de que nos encontramos en un momento excepcional, en medio de una pandemia que ha causado estragos y ha provocado (junto a la incompetencia de nuestros gobernantes) una situación de emergencia sanitaria, económica y social y, por lo que parece también moral.
Pero vayamos por partes, ¿Cuál es el motivo para aprobar en la mayoría de países occidentales el Pasaporte Covid con el que se restringen derechos fundamentales para las personas no vacunadas? Según nos dicen nuestros propios gobernantes evitar los contagios. Sí cómo nos dijeron nuestros gobernantes durante más de un año los vacunados estuviéramos a salvo y no pudiéramos contagiarnos, el debate sería otro, pero, a día de hoy sabemos con certeza que los vacunados con 2 dosis e incluso con 3, nos podemos contagiar y transmitir el virus al resto de personas. Razón por la cual no tiene ningún sentido hacer esa discriminación a ese sector de la población porque es totalmente ineficaz, ya que hay personas que entran a locales de ocio porque tenemos el pasaporte covid y podemos estar contagiados, pero, se le impide el acceso a personas no vacunadas que están sanas. Si se quieren restringir derechos y libertades qué los Gobiernos proporcionen test gratuitos a los diferentes locales y permitan entrar a los sanos. Porque la actual medida, tal y como está configurada, es totalmente injusta con los no vacunados y carece de sentido, no obedece a ninguna razón lógica.
En la práctica el pasaporte covid es un certificado que permite a los vacunados contagiar libremente. Y a un vacunado no tiene porqué importarle estar con un no vacunado, ya que aunque le contagie (también puede hacerlo un vacunado), él ya cuenta con la vacuna que va a evitar que enferme de gravedad, por lo que el vacunado ya está protegido, le tiene que resultar indiferente juntarse con un vacunado o no vacunado porque es la vacuna que lleva dentro de su cuerpo la que le protege.
Y entonces ¿Cuál podría ser la verdadera razón para que nuestros gobernantes aprueben tal discriminación hacia un grupo social? Sin ninguna duda buscar un chivo expiatorio, algo que el poder político ha hecho en innumerables ocasiones a lo largo de la historia. Se busca un grupo social al que culpabilizar de todos los males y, con todo el poder de las instituciones, medios de comunicación públicos y privados, se bombardea y manipula a la masa social para que centre sus iras en esos malhechores que son los culpables de todos los males que padecemos, evitando así que el foco de atención se ponga en aquellos que llevan dos años mintiéndonos, día sí y día también y, no acertando ni una, evitando así que exijamos responsabilidades a nuestros gobernantes.
Desde las Leyes de Nüremberg aprobadas por la Alemania Nazi en las que se imponía un certificado Ario, no se veía un retroceso de las libertades y de la moral parecido en occidente. Hay personas que todavía defienden a capa y espada que, por el hecho de ser una medida aprobada por un Parlamento elegido democráticamente, ya es una medida qué por sí sola tiene que ser buena y hay que cumplir y, eso pone de manifiesto el poco conocimiento que hay de la historia y que tan importante es. La ley de segregación racial de EEUU también fue aprobada en un país democrático y gozaba de mucha popularidad. En Gran Bretaña también bajo la bandera de ley democrática se castró químicamente a más de 65.000 homosexuales. Sin olvidar al propio Hitler que consiguió el poder democráticamente en la República de Weimar. Hay multitud de ejemplos de leyes aprobadas por parlamentos democráticos que han sido inmorales y nocivas para una parte de la sociedad. Y el Pasaporte Covid es una de ellas. Cuando pasen los años y miremos atrás, muchos sentiremos vergüenza por como afrontamos estos momentos, otros no tanto. Una medida por ser legal, no tiene porque ser justa, y si no es justa y es inmoral, debemos tratar de cambiarla, así es como ha logrado progresar la humanidad.
Y por último, ¿es realmente el Pasaporte Covid una medida “legal” en España? Desde luego todos tenemos que cumplirla porque así nos lo ha impuesto el poder político pero, eso no quiere decir que sea Constitucional, es más, vulnera claramente nuestra Carta Magna en su artículo 14 que dice “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social” y, también vulnera el 18.1 que dice “Se garantiza el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen.” Por no hablar de que también viola la Ley de Derecho del paciente o la Ley de tratamiento de datos personales. Pero es que además nuestra Carta Magna es muy clara respecto a los pasos a seguir si se quieren restringir derechos y libertades, por lo que en primer lugar, tenían que haber invocado un Estado de Excepción o de Sitio, o bien tener una Ley Orgánica para Pandemias que llevan diciendo dos años que van a aprobar y, nunca aprueban (están más ocupados contando los binarios que hay en España), para que les sirviera como paraguas jurídico antes de realizar la privación de derechos que están haciendo hacia una parte de la sociedad. Y que conste que yo estoy vacunado y tengo el pasaporte covid, pero es una auténtica barbaridad lo que está ocurriendo en occidente y, sobre todo, cómo está respondiendo la sociedad ante ello.
Por lo que además de ser injusta, no tener sentido, ser irracional e inmoral, parece que cuando sea valorado por el Tribunal Constitucional, y lo será, también será declarada inconstitucional, tal y como ocurrió con el Primer y Segundo Estado de Alarma. Pero nuestros gobernantes ya habrán conseguido su objetivo de tener entretenidos a la masa criminalizando a un colectivo que nada de culpa tiene, en lugar de que estemos pidiendo responsabilidades a los verdaderos culpables de la situación que padecemos, que no son otros que nuestros gobernantes. Cuya incompetencia, inacción y falta de previsión, nos ha llevado a la situación que tenemos y, la que nos viene.
