El verano se resiste a marcharse de Navarra. Aunque el calendario ya marca octubre, los próximos días traerán cielos despejados y temperaturas más propias de finales de agosto que de pleno otoño. La Agencia Estal de Meteorología anuncia que el calor se dejará sentir hasta el sábado, con máximas de hasta 28 grados, antes de un brusco descenso previsto para el domingo 5 que pondrá fin al episodio.
El arranque de este miércoles 1 de octubre ha dejado un ambiente estable, con el sol dominando en casi toda la Comunidad Foral. Pamplona ha rondado los 22 grados, mientras que Tudela y Estella han llegado a 24. Solo en Roncal el termómetro ha marcado valores más frescos, con 23 grados, acompañados de brumas matinales en zonas de sierra.
El jueves 2 continuará con esa misma tónica de cielos limpios y un aire más templado. Se repetirán algunas nieblas a primera hora en el noroeste, pero conforme avance la jornada las temperaturas volverán a repuntar: Estella y Pamplona alcanzarán los 26 grados, Tudela se quedará en 25 y Roncal en 25.
El viernes 3 será, según la AEMET, un día de transición. El cielo se cubrirá levemente de nubes altas, sin mayores consecuencias, y los termómetros apenas se moverán. La Ribera registrará 27 grados, Pamplona 25 y Roncal 24, prolongando la sensación de verano tardío.
El sábado 4 llegará con la paradoja del calor y las primeras lluvias. El cielo se irá cubriendo y se esperan chubascos en el noroeste y Pirineos, que no alcanzarán a la Ribera Baja. A pesar de esas nubes, Navarra seguirá rozando temperaturas de pleno estío: Tudela y Estella alcanzarán los 28 grados, mientras que Pamplona y Roncal se quedarán en 27.
Será el domingo 5 cuando el tiempo cambie de manera radical. La entrada de aire más fresco desplomará las temperaturas: 20 grados en Tudela y Estella, y apenas 19 en Pamplona y Roncal. Un contraste marcado que pondrá punto final a los últimos coletazos del verano en la Comunidad Foral.
