Era una noche la de anoche
de aire azul y silencio limpio.
Era una noche la de anoche
de aire azul y silencio limpio.
Las estrellas titilaban
expresando sus latidos
y los pájaros,
-por el día azucarados-,
dormitaban en sus nidos.
Era una noche la de anoche
para haberte conocido.
Sueños trigales recitaban
al viento sus suspiros
y la luna y su níveo halo
hacían eco a sus hechizos.
Era una noche la de anoche
perfecta para estar contigo.
A la orilla de mi sueño
mis párpados se han dormido.
Ya resuenan en mi mente
-como pétalos floridos-
las nanas de la noche
llevándome contigo.
Era una noche la de anoche
de aire azul para volar contigo…