Disfrazada ayer de polvo y hoy de ceniza de mar.
- sábado, 19 de abril de 2025
- Actualizado 18:56
Disfrazada ayer de polvo y hoy de ceniza de mar.
Enciendo mi pluma de luz
-fúnebre noche cerrada-
con tinta de un recuerdo añil
que en pena y dolor se baña.
Fue aquel año sin estío.
La mar con el mar se amaba.
Mi novia vestida en luna.
Sobre el pelo un velo malva.
Describirme a mí quisiera:
-pena, dolor y lágrimas-.
Pues me recuerdo tan feliz…
Lejana vida aún cercana.
El aliento de las brisas
parecían perfumadas
y era una orquesta la mar
de arpas, tambores y flautas.
¡Oh, si yo pudiera volver
a aquella mi vida clara
que hoy retorna,- claramente-,
en penumbra a mi mirada!
Era aquel rostro el de un ángel.
Un mirlo con alas blancas.
Su vestido: Aire de espumas
y caracolas varadas.
Arribó la muerte un día.
Aullido interno y guadaña.
Solo y triste y triste y sólo…
-pena, dolor y lágrimas-.