No hay secreto mejor guardado que aquel que todos conocen.
- sábado, 14 de diciembre de 2024
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No hay secreto mejor guardado que aquel que todos conocen.
Y bien lo sabes tú.
Que en silencio me has visto contemplar los adjetivos de las cosas más bellas.
Que con solo alzar los ojos has hallado mi corazón, profundamente, emocionado.
Como aquel día que el cielo estaba rosa. ¿Recuerdas? Cuando el murmullo de tu voz aflautada daba alas nuevas a mis ojos pensativos.
Siempre a mi lado.
Hace un mes te dije que era de la poesía secreta. En mi retina se quedaron grabados esos grandes ojos verdes tuyos sorprendidos.
Empezaste a comprender mis ausencias terrenales.
Advertiste que un perfume o una hoja marchita o la carne o la piel de una rosa o de una violeta estremecida tiene en mí la más grande de las preguntas o de las atenciones.
Que cuando te beso no es un simple beso y ya está. No, es mucho más que eso. Es mecerme en un sueño ondulado. Como la noche estrellada de Van Gogh. Algo así, diría.
Soy de la poesía secreta.
Y no me da miedo ni me causa rubor. Ya soy muy mayor para tantas tonterías.
No hago daño a nadie por espiar a la rosa.
Ni se enfada la mariposa si me oculto para verla volar.
Yo he visto cómo se vuelven locas las higueras con el viento.
Y cómo a los derruidos castillos de arena se acercan de noche los caracolillos blancos.
Y bien lo sabes tú.
Que siempre estás a mi lado. Callada y ausente como un poema de Neruda.
Acompañando de la mano a este poeta que es en ti y en su poesía secreta donde empieza y acaba el universo.
(A Sherezade)