• jueves, 10 de octubre de 2024
  • Actualizado 18:27

Blog / La Claqueta

“Joker 2”: ¿Qué ha pasado?

Por Santi Irurtia

Parece haber una reacción unánime de que la secuela de “Joker” es mucho peor que el mega hit de 2019. 

Joaquin Phoenix en Joker. Navarra.com
Joaquin Phoenix en Joker. Navarra.com

En los años 70, tras el éxito de la novela de ciencia ficción “Dune”, su autor quiso hacer una secuela principalmente por un motivo. Se dio cuenta de que sus lectores veían al protagonista Paul como un héroe y no como advertencia de los líderes mesiánicos. Por eso escribió “Dune: Mesías”, para dejar claras sus intenciones iniciales.

Lo mejor de la película: La excelente calidad de todos los equipos y lo arriesgada que es.

Lo peor: Consigue su objetivo, resultar frustrante.

Eso es lo primero que se me ocurre como motivo de que la secuela llamada “Joker: Folie à Deux” se centre en mostrarnos un Joker totalmente emasculado y castrado, a diferencia del original de 2019 que era desafiante y atrevido. Al fracaso de la película no ayuda que diferentes dinámicas en la secuela hagan que el ritmo decaiga como escenas musicales que no encajan, un drama judicial sin interés y un protagonista pasivo. El mayor reproche es al montaje que además de lento huele a que hay muchas escenas eliminadas.

¿Por qué han hecho esto? El equipo es el mismo del mega éxito original (que se puede ver en HBO, que tuvo más de mil millones y 11 nominaciones a los Oscar) que se apoyaba en unas bases tan sólidas como tener la estructura narrativa de “Taxi Driver” y la marca Joker. Debemos partir de que su director y guionista, Todd Phillips, no es ningún idiota.

Hay que poner en contexto que su motivación tras el “Joker” de 2019 era hacer un alegato por la empatía y una crítica a una ciudad en la que el contrato social está totalmente roto: huelga de basuras, desempleo, recortes en la seguridad social, plaga de ratas… Podéis imaginar su sorpresa cuando se tildó a su film de peligroso y preocupante porque supuestamente animaba a las revueltas y a la violencia. Casi un año después hubo periodistas que asociaron la película al asalto al capitolio estadounidense de 2021.

La secuela de “Joker” parece una reacción a esas críticas de espectadores preocupados que no supieron diferenciar la realidad de la ficción. La secuela busca quitarle al espectador la furia y el desencanto que llevan a la violencia y a la anarquía del personaje. Su intención parece la de desmitificar al líder de la revuelta.

A pesar de ello, la película obtiene lo que busca con éxito y a través de escenas y recursos bien medidos. Empieza con una violenta animación que nos adelanta el tema central, la disyuntiva entre el apocado Arthur Fleck y su orgulloso opuesto, Joker.

Encontramos a Arthur Fleck en Arkham debilitado, obediente y medicado. Ha vuelto a ser un don nadie hasta que conoce al personaje de Lady Gaga que equilibra su miserable existencia, de la misma forma que hacía el personaje de la vecina en la anterior película.

A diferencia de los cómics, es Lee (el personaje de Gaga) el que miente y manipula a Arthur para que se vuelva a erigir como Joker. Porque tanto el personaje de ella como los fanáticos fuera de los tribunales y los miembros de la audiencia buscamos lo mismo: queremos al Joker, Arthur nos interesa más bien poco.

El director y guionista ya decía durante la primera película que podría ser que Arthur no fuese el Joker que hemos conocido en el cine. No es esa mente criminal capaz de poner en jaque a una ciudad, sino que pudiera ser el germen original. En defensa de la cinta tengo que decir que es coherente con la primera, Arthur nunca fue alguien inteligente, manipulador ni valiente.

Cuando el antiguo compañero de trabajo de Arthur (que sufre enanismo) testifica se produce el punto de inflexión en la cinta para que Arthur deje de ser Joker. En ese testimonio se revela a Arthur como un opresor más que un oprimido. La máscara empieza a flojear.

Cae finalmente cuando recibe una brutal paliza por los guardias de Arkham y su principal amigo en el psiquiátrico es asesinado también por los guardias. La realidad golpea a Fleck. No es una figura anti-sistema. Es un asesino que quería sentir poder y usar ese poder para ser visto, pero Arthur Fleck no es nadie.

Ni siquiera tras la bomba en el juzgado ni cuando es recogido por unos imitadores, quiere ser Joker. Es interesante que todos hayamos visto estas dos películas por la promesa del Joker, igual que la marabunta. Y cuando Todd Phillips y Scott Silver (guionista) han tirado de la cortina, el mito cae y ya no nos hace ninguna gracia.

Finalmente, Arthur renuncia a su ego de Joker ante el tribunal, reconociendo que no es un grito de protesta, solo un hombre que sabía con lo que estaba haciendo. Solo era un don nadie que quería ser amado. Esta declaración provoca un alboroto entre sus seguidores, y Lee le da la espalda. Esta renuncia es lo que le acaba llevando a ser asesinado.

Entonces, ¿está mal sentirse traicionado por pasar dos películas centradas en un protagonista que nunca se convierte en el personaje que habíamos venido a ver? Se reduce a lo que quieres del Joker. Mi opinión es que hemos visto miles de historias del Joker en todos los medios a lo largo de la década, ¿por qué no arriesgarse en una película que no tiene conexión ni intenciones con un universo cinematográfico?

Quizás no sea el remate que merecemos, pero “Joker: Folie à Deux” baila a través de una entrega desordenada para aterrizar en un chiste bastante letal. No podemos forzar a un personaje a convertirse en algo que no es.

 

¿Tienes una tienda, un bar, un restaurante o un local comercial en Pamplona o alguna localidad de Navarra?

¿Quieres salir en nuestra sección de Comercio Local y que miles de personas conozcan todo lo que ofreces con una noticia y fotografías hechas por profesionales?

Escríbenos a esta dirección y hablaremos contigo para contactar cuando antes: [email protected]


Apóyanos para seguir realizando periodismo independiente.

  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
“Joker 2”: ¿Qué ha pasado?