El autor se pregunta si los políticos se han leído el Plan Director de la Policía Foral antes de hablar sobre el traspaso de competencias.
- domingo, 01 de diciembre de 2024
- Actualizado 21:02
El autor se pregunta si los políticos se han leído el Plan Director de la Policía Foral antes de hablar sobre el traspaso de competencias.
Leo con atención el libro del subinspector de la Policía Foral Mikel Santamaría, 90 años: Policía Foral de Navarra, donde por la celebración de sus 90 años de vida, hace un repaso de la historia de nuestra policía.
Pero coincidiendo con la onomástica, se ha abierto un debate sobre la materia de la asunción en exclusiva por parte de la Policía Foral de las competencias de Tráfico y Seguridad Vial. Pero en el marco de este debate sale a la palestra el Plan Director, realizado por la Dirección General de Interior del Gobierno de Navarra.
En ese plan director se habla de la estrategia que el Gobierno de Navarra tiene para el devenir de nuestra policía, pero para elaborarlo, antes se realizaron encuestas y evaluaciones para trabajarlo posteriormente, o eso quiero creer, porque a la vista de las decisiones tomadas por el departamento de Interior, parece que poco caso hicieron al diagnostico que salió de ese estudio previo.
Me explico: se dibujaron tres escenarios para el futuro de nuestra policía. El primero, un modelo policial de coexistencia, como el actual; el segundo, un modelo policial de complementariedad o suplentariedad: y el tercerp, un modelo policial de exclusividad. Esos tres escenarios se llevaron a estudio para nuestra policía. Tras la encuesta, los datos dieron con el segundo escenario, el intermedio, como el más idóneo para nuestra policía.
Pues bien, en la presentación del Plan Director, la consejera de Interior dijo que el escenario que elegían era el tercero, el de la exclusividad en materia no solo de Trafico, sino también de la Seguridad Ciudadana y del Medio Ambiente. Puede ser un escenario tan válido como los otros dos, pero por lo menos se podrían haber ahorrado el estudio estadístico y la evaluación de puestos de trabajo, si de antemano tenían decidido el escenario que querían.
Pero analizando el Plan Director, salen a la luz unas coincidencias o sinergias con un plan director que en el año 2013 realizo el departamento de Seguridad del Gobierno Vasco para la Ertzaintza, ya que los dos planes son coincidentes en materias como la misión, la visión y los valores. Pero donde en realidad se funden los dos modelos policiales es en el uso de la inteligencia como principal herramienta, con una salvedad, que la Ertzaintza desarrolló ese plan en el 2013 denominándolo Horizonte 2016, y aquí en el 2018 andamos en la tesitura de si son galgos o podencos.
Que de un tiempo a esta parte se han estrechado lazos entre la Ertzaintza y la Policía Foral es de todos sabido, todo ello basado en la buena sintonía entre las consejerías, pero muchas veces veo cómo de la buena sintonía a querer ser como el vecino hay muy poco.
Ver cómo, por ejemplo, la nueva promoción de policías forales realiza parte de su formación básica en la Academia de la Ertzaintza. O cómo en agosto del 2017, el departamento del Interior del Gobierno de Navarra lanzó a bombo y platillo la “Patrulla de Respuesta Inmediata” de la Policía Foral, formada por tres integrantes y preparada para dar respuesta a incidentes críticos. No obstante, si miramos el despliegue de la Ertzaintza, vemos cómo en enero de ese mismo año creaban la “Patrulla de Respuesta Inmediata”, formadas por tres hombres e ideada para dar respuesta a incidentes graves. Por lo menos, quien dirige nuestra policía se podría haber molestado en cambiarle el nombre; pues ni eso.
Estos son solo dos simples ejemplos (hay mas) de cómo el departamento del Interior del Gobierno de Navarra hace ascos y busca un escenario de independencia total en materia policial. Si viene por parte de las policías que día a día se dejan la piel con nuestra Policía Foral, nada; pero si es el vecino quien te llama para que te hagas la foto, vas raudo y veloz.
Nuestra Policía Foral, tras sus 90 años de historia, tiene la solvencia suficiente para formar a sus aspirantes a agentes y nunca ha necesitado copiar a nadie para realizar con brillantez su trabajo. La Policía Foral nace por el empuje de nuestra Diputación Foral, que no es más que la voz de todos los navarros. Por lo tanto, es y será una policía integral e integradora, que se ha crecido ante las adversidades y que siempre ha estado orgullosa de lo que es y de a quién sirve.