• viernes, 29 de marzo de 2024
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Opinión /

Modelo policial para el siglo XXI ¿Y Navarra?

Por Gustavo Galarreta

Durante casi un año se ha trabajado en el Congreso de los Diputados sobre el modelo policial del siglo XXI para nuestro país, en Abril del 2018 se creaba una Comisión para el estudio del modelo policial del siglo XXI, la cual se ha dado por cerrada hace unos días.

La presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, preside el acto de celebración de la fiesta de la Policía Foral. MGUEL OSÉS
Celebración de la fiesta de la Policía Foral. MGUEL OSÉS

Un foro de debate, en el cual; grupos politos, policías, sindicatos y expertos en el los distintos ámbitos de la seguridad han puesto sobre la mesa sus impresiones sobre el presente y sobre todo el futuro de nuestro modelo policial.

Lo primero que se ha puesto sobre la mesa es la necesidad urgente de actualizar la Ley Orgánica 2/1986, de 13 de marzo de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que es la encargada de regir el funcionamiento de nuestros cuerpos de seguridad, ya sean de ámbito nacional, autonómico o local. En las distintas sesiones se han puesto sobre la mesa datos sobre; ratios de policías por población, gastos presupuestarios, índice delincuenciales y algunos más, que han dado como resultado que el modelo policial diseñado para unas policías de los años 80 se ha quedado totalmente obsoleto, dando como resultado un modelo policial ineficiente en lo relativo a recursos humanos, formativos, tecnológicos y de coordinación.

Para que el lector tenga una idea de las cifras sobre las que se trabajan, indicaremos que en España contamos con más de 2.000 cuerpos de Policía Local que arrojan una cifra total entorno a los 70.000 agentes que dependen de los distintos Ayuntamientos, 1.000 agentes de Policía Foral, 8.000 de la Ertzaintza, 17.000 de los Mossos d’Esquadra, 100 de la Policía Autónoma de Canarias, 65.000 de Policía Nacional y los 75.000 de Guardia Civil, a los que se deben sumar; Policía Portuaria, Vigilancia Aduanera y Agentes Forestales como agente de la autoridad, todo ello nos da una cifra de más de 243.000 efectivos. 

Pero si nos fijamos en los países que deberían ser referencia para nosotros como son Francia y Alemania, los datos nos indican que el país galo cuenta con 260.000 efectivos y el país teutón cuenta con 245.000, si tenemos en cuenta que la población de estos dos países  supera con creces a la española, nos damos cuenta de cómo el ratio por cada 100.000 habitantes en España es de 500, en Francia 322 y en Alemania de 297. Si esto la llevamos al ámbito económico se desprende la cifra de 4.000 millones que son los euros que nuestro sistema de seguridad pública gasta de más en relación a los países europeos.

En las distintas comparecencias se han aportado testimonios indicando que nuestro sistema policial resulta costoso, cuenta con  problemas en materia de duplicidad de estructuras operativas, mala definición de competencias, siendo endémica la descoordinación a nivel funcional y sistemática entre los distintos cuerpos de seguridad de España. 

Puede parecer que este modelo policial obsoleto repercute en negativo respecto a la población, pero nuestro sistema de seguridad aporta un alto grado de eficacia, si nos fijamos en las tasas de criminalidad más bajas de Europa o los datos sobre homicidios los cuales nos indican que España  cuenta con una de las tasas más bajas del mundo, de lo que se desprende que nuestros policías trabajan bien.

Pero lo que la sociedad española demanda es una respuesta ante las nuevas formas de delincuencia y ante los nuevos desafíos en materia de seguridad, espera que nuestros políticos;  escuchen a los que tiene algo que decir en materia de seguridad y modelos policiales, para posteriormente legislar y crear las leyes pertinentes que nos doten de las herramientas necesarias para realizar una gestión eficiente de los recursos con los que cuentan las distintas administraciones. Si nos fijamos en países de nuestro entorno vemos que unos cuentan con un modelo más centralizado y otros descentralizados, pero ninguno que funcione bien duplica infraestructuras, esconde información, duplica trabajos, trabaja para la estadística, etc.

En Navarra sabemos un poco de las deficiencias de un modelo policial caduco, como son; falta de coordinación, duplicidad de tareas, utilización de la policía como herramienta política, etc. Pero también sabemos de los años y años de buen trabajo en equipo de las distintas policías que trabajan en Navarra, también sabemos cómo en los peores momentos poco importan los colores si no el ciudadano. Por eso, las distintas policías demandan un pacto de estado donde de una vez por todas se adecuen las leyes y los protocolos necesarios a la realidad del siglo XXI y a la realidad de una sociedad en constante evolución. 

Muchos han sido los ponentes en esta comisión de estudio del futuro de nuestra policía, han participado en el Congreso de los Diputados; Policías Nacionales, Ertzainak, Guardias Civiles, Mossos, expertos en ciber seguridad, etc. Pero si el lector esperaba saber cómo nuestra Policía Foral afronta este reto vital para el devenir de las policías, se quedará con las ganas, ya que ningún representante de Policía Foral estuvo presente durante los meses que ha durado esta comisión de estudio. Cuando alguien cree en algo y me refiero a quien dirige a nuestra policía desde puestos políticos, hace lo posible imposible para que su voz se escuche en los foros de discusión y toma de decisiones, nuestra policía no se puede quedar en el vagón de cola en lo que se refiere al futuro de nuestro sistema público de seguridad.


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