El jubilado pamplonés Ubaldo Marcos Hernández, de 74 años, está satisfecho con su última creación. Es una maqueta ferroviaria con protagonismo del acueducto de Noáin, que se puede ver en la panadería Ogipan en la calle Esquiroz 7 en el barrio de Iturrama de Pamplona.
Esta panadería está muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en nuestra sección de comercio local, como por ejemplo pollos Labea o el bar Amanecer.
Esta espectacular maqueta ocupa una zona interior de la panadería junto a uno de los cristales que dan al exterior. Lleva colocada solo unas semanas y sustituye a otra anterior, del mismo creador, que era la futura estación de ferrocarril en Berriozar.
Ubaldo Marcos está ahora pendiente de la recuperación de su rodilla derecha. Con una muleta de ayuda nos ha explicado que desde niño ha tenido auténtica pasión por las maquetas y el ferrocarril. Dispone de una bajera en la Rochapea donde trabaja casi a diario y guarda auténticos tesoros.
Este jubilado pamplonés ha señalado: "Estamos cambiando y variando lo más posible. Este año ya sabes que soy acérrimo de los trenes y me dio la ocurrencia de hacer el acueducto de Noáin, que está relacionado con el tren y es muy de la cuenca de Pamplona".
"Lo adapté al hueco que me dejan en la tienda. Lleva colocado desde finales de febrero y espero que esté hasta el año que viene. Suele estar en el escaparate más de un año e incluso más tiempo, depende de si tengo otro para poner", explica Ubaldo.
El acueducto de verdad solo tiene un arco por donde pasa el tren, "pero yo lo adapté y coloqué dos para darle forma. Voy haciendo las cosas poco a poco. Ahora estoy mitad rehabilitación de mi rodilla con 74 años y mitad con mi hobby. Tengo en la bajera un montón de cosas y hay que exponerlas todas.
En la panadería le acogen con gusto. "Paco, el dueño de la panadería, es un fenómeno y me pregunta cuál va a ser la siguiente creación. No tengo ni idea. Tengo un montón de cosas. Hay unas más modernas como la estación del año pasado y otras más antiguas".
En esta maqueta "las máquinas son más antiguas, más clásicas. Adapto los coches de la época, las figuras. Por ejemplo, hay dos figuras de mujeres trabajando con un rastrillo en una huerta junto al acueducto", señala Ubaldo.
Sigue con una enorme ilusión. "Ahora me quita el hobby el nieto porque lo quiere adaptado a él. Le he hecho un tren de madera aunque todavía no sabe andar", comenta Ubaldo Marcos.
La maqueta está construida de madera con un tratamiento final de arena "que se puede tocar". Luego hace los bloques y lo pinta. "Las máquinas de la maqueta son más modernas. Uno es un automotor que se llama de Zaragoza y el otro es el famoso Tarazonica de via estrecha que tiene muchas anécdotas".
Por último, Ubaldo Marcos explica que ha colocado luz eléctrica a la maqueta y ésta se ilumina a partir de las siete de la tarde y durante la noche, para regocijo de los clientes y paseantes de la calle Esquiroz 7 en Pamplona.
