Ediles de la formación abertzale pidieron en abril de 2013 la dimisión del entonces alcalde de Pamplona al ser imputado
- miércoles, 11 de diciembre de 2024
- Actualizado 14:05
Ediles de la formación abertzale pidieron en abril de 2013 la dimisión del entonces alcalde de Pamplona al ser imputado
El concejal de Bildu Joxe Abaurrea declarará el próximo día 25 ante un juez de Pamplona en condición de investigado –nueva denominación que sustituye a la de imputado– por un supuesto delito de prevaricación administrativa por la denegación de la licencia de apertura de un bar. En pura coherencia, si la formación abertzale fuera consecuente con sus exigencias en casos análogos, Abaurrea debería presentar su dimisión antes de comparecer ante el juez. Son esclavos de sus palabras.
Cabe recordar al respecto que, el 3 de abril de 2013, los concejales de Bildu y Aralar, que formaban parte de la coalición EH Bildu, no sólo pidieron la dimisión del entonces alcalde, Enrique Maya, tras ser imputado por las dietas de Caja Navarra, sino que afirmaron que no debía declarar ante la juez "en calidad" de primer edil de Pamplona.
Entonces, la portavoz de Bildu en el Ayuntamiento, Eva Aranguren, que ya había reclamado anteriormente la dimisión del alcalde, aseguró en una rueda de prensa que era "insostenible que Maya siguiera siendo alcalde tras conocerse su imputación" y añadió que era "inadmisible" que declarase ante la juez "en calidad de alcalde". "Enrique Maya tiene que dimitir antes de esa fecha y presentarse ante la justicia como un ciudadano más, por responsabilidad política y por respeto a la ciudadanía", sostuvo.
Maya no dimitió y a los pocos meses el caso fue archivado por el Tribunal Supremo al considerar que no había delito alguno en el cobro de las dietas de Caja Navarra. Pero el daño causado ya estaba hecho. EH Bildu, y otros grupos políticos, elevaron tanto el listón de las responsabilidades políticas ante la mera apertura de una investigación judicial que ahora son reos de sus propias manifestaciones y exigencias.
Siguiendo su propia doctrina, Abaurrea tendría que dimitir antes del 25 de enero puesto que no debería comparecer ante el juez "en calidad" de concejal de Pamplona.
Sin embargo, Abaurrea no dimitirá. Seguro que no. Como se ha comprobado en el caso del atropello de la concejal Maider Beloki, Bildu decía una cosa en la oposición y hace la contraria en el gobierno. Nada nuevo.
Las gruesas palabras vertidas desde la oposición han quedado en el pasado –que no en el olvido puesto que ahí está la hemeroteca– y han dado paso a actuaciones antitéticas a las defendidas entonces cuando todo valía en la estrategia de acoso y derribo político, mediático y social contra UPN tanto en el Gobierno de Navarra como en la alcaldía de Pamplona.
Desde Navarra.com consideramos que no todo vale. Por eso, entendemos que, salvo en los casos de delito flagrante, hay que ser respetuosos con la presunción de inocencia y que, por norma general, un cargo público investigado (imputado) no tiene que dimitir hasta que no se decrete la apertura de juicio oral.