• viernes, 13 de septiembre de 2024
  • Actualizado 09:01

Opinión / A mí no me líe

Los abertzales atrapados en sus 'manifas'

Por Javier Ancín

En vez de dejarlo, asumir su derrota vital personal (...)  siguen concentrándose con la excusa absurda que sea porque no saben hacer otra cosa.

Multitudinaria manifestación con miles de personas por las calles de Pamplona bajo el lema `Paremos el genocidio en Palestina. Fin al comercio de armas y a las relaciones con Israel". La movilización estaba convocada por la plataforma 'Yala, Nafarroa con Palestina' e integrada por colectivos, ONGs, partidos políticos, sindicatos y personas a título individual. IÑIGO ALZUGARAY
Manifestación a favor de Palestina por las calles de Pamplona. IÑIGO ALZUGARAY

Hay un vídeo de Umberto Eco paseándose por su biblioteca que de vez en cuando lo miro para recordarme que soy mortal. Básicamente es un piso de pasillos estrechos donde todo está lleno de estanterías con libros, un poco de aquella manera, desordenado, que desemboca en una estancia más amplia, se supone que el salón del piso, con más baldas y más libros. Vale. Bien. Perfecto.

Es su gran obra, de la que se siente más orgulloso, por eso se deja filmar, por eso quiere mostrarla a las visitas. A eso dedicó su vida, a llenar de libros un piso como de Carlos III, uno de esos de la constructora Barcos cobrados en el franquismo. Muchos libros, en ese paseo se ve para moverlos hasta una absurda carretilla como las de reparto de bultos de cualquier empresa de envío de paquetes. Y para qué... un piso de pasillos estrechos tampoco trasmite grandeza o trascendencia.

De jovencito, cuando crees en cosas y piensas que la vida tiene sentido, era mi gran sueño, construir a lo largo de mi vida una cosa así, más humilde, obviamente, pero con el mismo espíritu. Libros y libros en estanterías por casa. Lo he conseguido a medias, un poco como la tumba de Julio II de Miguel Ángel, que iba a ser un conjunto monumental, una especie de pirámide repleta de figuras, y que hoy se ha quedado en una cosa en tierra de nadie, donde si no llega a ser por el Moisés, en mi caso la colección de Tintines y una edición ilustrada muy fina de Los tres mosqueteros, aquello trasmitiría más pena que gloria y nadie iría ni a visitarlo, como al río Duero del poema de Machado a su paso por Soria.

Hoy, que he asumido la absurdez de la vida y con ella las misiones vitales, ya solo aspiro a que, como buen amo de casa, las lentejas puestas al fuego no se me peguen ni se me pase el punto de sal. Y poco más.

Lo pensaba el otro día, que no hay peor cosa que quedarse atrapado en espiral en un proyecto de estos de vida, cuando ya no tiene ningún sentido. Un poco como el chiflado de la peli esa de Spielberg, La costa de los mosquitos, que sigue hasta reventarse la cabeza y volverse loco, porque la alternativa es el vacío, ¿y ahora qué hago? ¿cómo seguir cuando asumes que has dedicado tu vida a un proyecto que es un fracaso?, que le da aún más pavor.

Lo pensaba, digo, viendo a los aberchándales de toda la vida en una de sus monsergas, ahora repleta de banderas palestinas. Llevan gobernando Navarra y Pamplona entre pitos y flautak una década y ahí siguen, de manifa en manifa, como cuando se manifestaban para conseguir el poder, que ya lo tienen.

En vez de dejarlo, asumir su derrota vital personal, su causa ha vencido pero no saben ni para qué, porque ellos siguen siendo individualmente los pringados que siempre fueron -quien era operario de cadena sigue siendo operario de cadena. Te han engañado, primo- e irse a la cocina a hacer lentejoak, siguen concentrándose con la excusa absurda que sea porque no saben hacer otra cosa.

Su ideología ganó, es hegemónica ya en Navarra, pero su paraíso personal no ha llegado, y como no pueden manifestarse contra el sistema porque el sistema en Navarra son las élites de ellos mismos, pues a seguir recorriendo las calles en manada con ese soniquete de laaaaaa-la-laaaaa-la-laaaaaaa... laaaaa, laaaa, laaaaaaaa, ya sin objetivo real alguno. Y eso es todo.

Apóyanos para seguir realizando periodismo independiente.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
Los abertzales atrapados en sus 'manifas'