• lunes, 16 de septiembre de 2024
  • Actualizado 14:19

Opinión / A mí no me líe

El PSOE habla de los caídos cuando quiere ocultar algo

Por Javier Ancín

Esto de los edificios con significación ideológica es una de las mamarrachadas más gordas que he escuchado en mi vida. ¿No es igual de franquista el edificio que ocupan la UGT y CC OO en la avenida de Zaragoza? ¿Hay que demolerlo también, por haberse construido en los años 50 con el mismo planteamiento monumental para albergar el sindicato vertical franquista?

Monumento a los Caídos en Plaza de la Libertad de Pamplona.
Monumento a los Caídos en Plaza de la Libertad de Pamplona.

La primera vez que vi el Guernica, el cuadro de Picasso, fue en la plaza Conde de Rodezno, en la consulta de la pediatra Oyarzabal. Desde entonces siento fascinación por esa plaza y no quiero que toquen ninguna piedra que hay en ella. Franco llevaba muerto años cuando me metían febril en el coche, aparcábamos en las medianas de la Avenida Carlos III, entre los árboles, y andando, nos metíamos en esa plaza de porches y lamparones de luz inmensos, con grandes portales que abrumaban, para subir a la tortura que es un médico cuando eres un enano sin significación política alguna.

Me sentaban en la sala de espera y miraba el cuadro, fascinado, aterrorizado, mientras al fondo del pasillo se escuchaban los llantos, sollozos y gritos de otros niños. Aquello si que era el horror, su representación más certera. Yo sí que sé lo que significa ese cuadro, su trascendencia, porque lo experimenté en mi mismo, comido por la fiebre y el miedo, sin poder tragar.

Años después, cuando lo vi colgado en el Museo Reina Sofía, me eché la mano a la garganta, agobiado por el recuerdo de la opresión del palito que me metían en la boca, hasta casi ahogarme, para mirarme las amígdalas siempre purulentas, que acabaron por quitármelas con el tiempo. Menudas infecciones, tú. Espantosas. Nunca he tenido después una conexión tan fuerte con ninguna obra de arte.

A mí esa plaza de inspiración soviética, una mole de arenisca con su enorme estanque y su sonido acuático que relaja mucho, de centinela el coreano de Oteiza, yo creo que la mejor obra del escultor vasco, su cúpula a la manera de las del renacimiento italiano, en mitad de un bosque, me gusta. Me gusta porque no tiene sentido, porque esa mole estatalista abruma al paseante, lo deja completamente a la merced del conjunto, insignificante en su dimensión. No parece Pamplona. Siempre me ha parecido Moscú. La rusa no podía haber elegido mejor emplazamiento para que pasen por su local políticos de todos los partidos.

Esto de los edificios con significación ideológica es una de las mamarrachadas más gordas que he escuchado en mi vida, pero bueno, con algo hay que pasar el rato. ¿No es igual de franquista el edificio que ocupan la UGT y CC OO en la avenida de Zaragoza? ¿Hay que demolerlo también, por haberse construido en los años 50 con el mismo planteamiento monumental para albergar el sindicato vertical franquista?

Puestos a derribar construcciones de significación franquista, yo tiraría antes abajo todos esos edificios ramplones de la constructora de la familia que componen el Segundo Ensanche. Cutrillos, provincianos, desangelados, carentes de cualquier aspiración, renunciando a cualquier destello de belleza. Su único discurso arquitectónico es el de cling-cling-caja: me forro con el franquismo, me sigo forrando con el antifranquismo sobrevenido.

Al final, todos estos que nos quieren tirar abajo media ciudad porque ven a Franco hasta en su cuenta corriente, o sobre todo en su cuenta corriente, acaban siendo más franquistas que el propio dictador. Cuando acabada la guerra, se preguntaban en Madrid qué hacer con el edificio a medio construir de Nuevos Ministerios, Franco dijo que siguieran con el diseño original, que para qué perder dinero realizando otro. Si hoy ven la planta de esa mole proyectada en la república y terminada durante la dictadura, se darán cuenta de que tiene forma de hoz y martillo comunistas. Y así se decidió que siguiera. Y así continúa hoy, sin que le preocupe a nadie.

El problema con esa plaza es que el PSOE, cuando le salen noticias terribles para sus intereses, dejando constancia de lo inútiles que son, Navarra es la comunidad en la que más ha subido la vivienda hoy, ahora, en este momento, pues algo tienen que hacer para desviar el foco. Como los edificios ni se quejan, ni protestan, ni dicen nada porque nada significan, pues amenazan con demolerla, que eso parece que va a solucionar que los jóvenes, en una charca como Nafacroa, sigan sin poder independizarse. La realidad, que siempre es menos épica, más prosaica, es que Txibite es la presidenta de Navarra que menos vivienda protegida ha construido durante la democracia. Eso sí, por tener, en su gobierno sus socios tienen hasta una Consejería de vivienda, que nadie sabe para qué sirve salvo para derrochar dinero en sueldazos, para más coña del asunto.

Mucha promesa de independentzia en abstracto, Gora Euskadi Askatuta, pero cuando hay que concretarla, Gora un pisito donde vivir Askatuta, en casa de los aitas hasta que te mueras. Y eso es todo.

Apóyanos para seguir realizando periodismo independiente.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El PSOE habla de los caídos cuando quiere ocultar algo