Faltan apenas dos semanas para que conozcamos el nombre del futuro alcalde o alcaldesa de Pamplona y poco menos de cinco para el seis de julio. Para entoces Enrique Maya ya no será alcalde de la capital navarra, pero antes de irse quiere dejar nombrada a la persona que se encargará de lanzar el Chupinazo anunciador de las fiestas de San Fermín.
Lo cierto es que se trata de una competencia del alcalde lanzar o ceder el honor de lanzar el cohete a quien considere oportuno, pero no deja de ser un gesto feo designar a alguien, cuando quien vaya a ser alcalde (o alcaldesa) el día seis de julio, tal vez tenga otras intenciones.
El caso es que Enrique Maya, en una entrevista concedida a una radio local, ha asegurado que tiene intención de anunciar un nombre en breve, antes de la constitución de los ayuntamientos del 17 de junio, y por lo tanto, antes de que la corporación municipal recién salida de las urnas, tome posesión de sus sillones en el salón de plenos.
Y es que Maya ha recordado en la entrevista que le gustaría encontrar un lanzador de consenso entre los grupos municipales que tienen representación en la actualidad, aunque ha pedido que "así como yo en 2019, cuando recuperé la Alcaldía, respeté lo que ya había sido elegido, la propuesta que yo les haga les parezca bien y podamos consensuarla".
Así, ha asegurado que ya tiene pensado un nombre y que lo desvelará próximamente, sin decir qué día en concreto. “Va a ser pronto, pero no puedo desvelar nada. Me gustaría intentar el consenso de los distintos grupos municipales, pero ya sé que no les gusta el sistema porque prefieren un proceso participativo. Lo que les pido es que así como yo en 2019, cuando recuperé la Alcaldía, respeté lo que ya había sido elegido, que era La Pamplonesa, la propuesta que yo les haga les parezca bien y podamos consensuarla. A ver si es posible", ha dicho.
Efectivamente, cuando él tomó posesión como alcalde por segunda vez, el 15 de junio de 2019, el Gobierno municipal de Joseba Asirón ya había hecho público (tres días antes) que sería La Pamplonesa la encargada de lanzar el Chupinazo; si bien, aquella elección fue fruto de una votación popular.
Se trata de una estrategia radicalmente diferente a la empleada por el propio Maya en junio de 2015, cuando finalizó su primera etapa como alcalde antes de la toma de posesión de Asirón. Entonces decidió que lo adecuado era que el nuevo alcalde de la ciudad designara al lanzador del cohete.
Asirón decidió entonces, a unos días de comenzar las fiestas, que los encargados fueran el Orfeón Pamplonés, que cumplía 150 años, y descendientes de miembros de la desaparecida peña La Veleta a propuesta de la politizada Federación de Peñas de Pamplona y los colectivos de memoria histórica de la capital navarra.
