Todos los candidatos de los partidos políticos de Navarra que concurren a las elecciones del 28 de mayo tienen un perfil más o menos conocido. Su permanencia durante muchos años en la política les lleva a ser rostros reconocibles por una importante mayoría de ciudadanos. Pero no sucede lo mismo con Maite Nosti, la candidata de Vox a la presidencia del Gobierno de Navarra, una mujer jubilada recientemente, que ha desempeñado toda su actividad laboral en el campo de la medicina.
Nació por accidente en Albelda de Iregua (La Rioja), de madre riojana y padre asturiano, pero residentes en Pamplona. "A mi madre le cogió el parto allí, pero me considero pamplonesa a todos los efectos", asegura. Se licenció en Medicina por la Universidad de Navarra en 1980 y trabajó haciendo sustituciones durante los primeros siete años de su vida laboral.
Después se pasó a la industria farmacéutica, donde ejerció como delegada en laboratorios de Navarra, La Rioja y Soria, hasta que le surgió la oportunidad de volver a ejercer la medicina en Atención Primaria, en Atención Rural, en Urgencias Rurales y en la última etapa en el Servicio de Urgencias Extrahospitalarias del Servicio Navarro de Salud, en el centro médico Doctor San Martín y SOS Navarra.
Asegura que siempre ha tenido inquietudes políticas, aunque nunca las había desarrollado. "Siempre he sido de leerme los programas de los partidos políticos y buscar cuál era el que mejor se amoldaba a mi manera de pensar", dice. Así, cuando surgió Vox y leyó su ideario "me di cuenta de que me identificaba con el sentido común que ofrecen sus propuestas".
Decidió que se afiliaría una vez que alcanzara la jubilación y, tras las navidades de 2021 y tras terminar su vida laboral, comenzó a hablar con otros militantes y ofreció su ayuda para lo que la necesitaran en el partido. Fue entonces cuando le encomendaron que llevara las relaciones del partido con los afiliados en Navarra y ahí se ha mantenido, desempeñando trabajos internos hasta que le propusieron para encabezar la lista.
"Estoy contenta, sé que es una responsabilidad y que me arriesgo a muchas cosas, pero si puedo conseguir que se empiece a hablar de Vox y que la gente tome conciencia del desastre que tenemos alrededor y en el que nos han sumido Chivite y Pedro Sánchez, me doy por satisfecha", subraya.
Nosti, aficionada a la lectura, y a la práctica de deportes como el esquí o la natación, considera que la mayor cualidad que debe tener un político es saber escuchar a los profesionales antes de comenzar a tomar decisiones. "No puedes legislar en contra de lo que los profesionales te dicen, como hace este Gobierno, o en contra de los empresarios sólo para recaudar más, porque nos están empobreciendo", remarca.
También considera fundamental la honradez, "que se les presupone a todos y que lo primero que hacen es pisotearla cuando tienen un 'carguito', nombrando por la vía del enchufismo a amigos y conocidos". Por eso considera que es necesario regenerar las instituciones comenzando por la supresión de todos los gastos superfluos. "Hay que desmontar todos los chiringuitos que se han montado entre Chivite y Barkos con un Gobierno sobredimensionado en consejerías", apunta.
Otra de las tareas necesarias -explica- es "bajar todos los impuestos porque no hace falta recaudar tanto para mucho gasto inútil como sucede ahora". "Tienen a las empresas, pero especialmente a las pymes achicharradas a impuestos y eso está provocando que muchas huyan de Navarra. Sólo así podrán generar empleo, tener más cotizantes y hacer de la comunidad una potencia económica próspera, porque Navarra tiene todas las potencialidades, pero se las están cargando".
La candidata de Vox sostiene que son muchas las cosas por hacer "después de ocho años de gobiernos de nacionalistas y socialistas", empezando por el euskera. "Me parece estupendo que a todo el que quiera estudiarlo se le facilite, pero no que se le pague, porque es una lengua tan muerta como el latín y se podrá utilizar en el ámbito de lo cultural o lo romántico, pero no es una lengua que pueda servir en el futuro para ganarte la vida, salvo para colarte como funcionario con menos méritos que otros en la administración en un trato discriminatorio hacia la inmensa mayoría, que no lo habla".
La candidata, señala que no tiene grandes aspiraciones personales o individuales en la política. "Soy una persona normal y corriente que nunca ha estado en política y que quiere simplemente ayudar a deshacer todas las barbaridades que están haciendo los gobiernos de Pedro Sánchez y Chivite con sus pactos antinaturales con comunistas y nacionalistas".
De este modo, critica la unión de ideologías tan dispares como la de "socialistas con los nacionalistas de ultraderecha del PNV, los comunistas abertzales y proetarras de Herri Batasuna y el comunismo casposo de Podemos". "Los cuatro juntos lo único que buscan es mantenerse ahí por sus intereses particulares y no por el bien común".
Piensa, además, que a la actual clase política navarra "se les han subido los cargos y los escaños a la cabeza". "Viven en otra onda alejada de los problemas reales de la gente. Yo nunca me he dedicado a la política ni quiero hacer una carrera política, sólo que empiecen a cambiar las cosas y se terminen los despropósitos de las leyes que se están aprobando como la de Vivienda, la del sí o es sí, o tantas otras", sentencia.
Es consciente de que si alcanza un escaño en el Parlamento de Navarra, estos partidos "van a ningunearme, marcharse cuando intervenga e intentar hacerme el vacío en la cámara... Pues que me lo hagan. No son familia mía, no me va a doler. Peor para ellos. No me harán el feo a mí, se lo harán a los miles de navarros que van a votar estas ideas".
Por eso, considera que "los navarros somos gente sana que estamos hartos de tanta tontería. Exponiéndoles las cosas claras y sin mentirles ni engañarles, toda la sociedad vamos a ser capaces de seguir siendo libres, como hemos sido siempre, porque ahora con estos gobiernos, estamos más machacados que en tiempos del dictador".
