Se puso a llover en Pamplona justo cuando el primer toro ya había salido por toriles. Jiménez Fortes lo había ido a esperar a porta gayola, todavía sin una gota de agua, y lo saludó con unas verónicas de categoría que marcaron el tono de su tarde. El toro, llamado Tinajón, resultó ser un gran ejemplar de La Palmosilla, y la faena fue un derroche de clase y torería. Bajo la lluvia, toro y torero parecían bailar con un compás clásico y emocionante. Fue una pena que buena parte del público huyera de los tendidos, porque la faena merecía más testigos. Aun así, Fortes dejó una gran estocada y cortó una oreja merecida. Al término del primer toro cesó la lluvia.
El cuarto fue menos agradecido. Manseó desde el inicio y ofreció pocas opciones, pero Fortes lo llevó al centro del ruedo en busca de alguna virtud. El toro, especialmente por el pitón izquierdo, pasaba sin entrega y deslucía cada intento. No fue una faena completa, pero sí trabajada, con momentos de calidad que el torero supo exprimir. La estocada, defectuosa, no impidió que el público pidiera la oreja, que finalmente fue concedida.
Fernando Adrián no logró centrarse con su primero. Fue una faena sin ritmo ni estructura, en la que no terminó de conectar ni con el toro ni con la plaza. Los problemas con la espada y el descabello terminaron en un sainete muy protestado desde los tendidos.
El quinto fue otra historia. Un toro muy serio y exigente que no permitía un segundo de respiro. Adrián salió a por todas: de rodillas, pasándoselo por la espalda y metido en terrenos comprometidos desde el primer momento. En uno de esos arrimones se llevó una voltereta brutal, con golpe y paliza incluidos. Hasta entonces, había conseguido ligar algunas tandas interesantes con la mano derecha, aunque la faena no terminó de cuajar. A pesar del susto, mató con determinación y la plaza, emocionada, pidió con fuerza las dos orejas, que el presidente concedió.
Ginés Marín no terminó de entenderse con el tercero, un buen toro aunque algo justo de presencia para Pamplona. Comenzó la faena sentado en el estribo y logró algunos derechazos largos y templados, pero sin demasiada conexión ni acople. El conjunto no tuvo transmisión y el fallo con la espada cerró cualquier opción de premio.
Con el sexto se jugaba todo. Sus compañeros ya tenían la puerta grande asegurada y Marín necesitaba un golpe de efecto. El toro fue exigente, pero el torero supo llevarlo poco a poco, sin prisas, hasta sacar lo mejor en la parte final de la faena. Hubo una tanda de derechazos largos que levantó al público, aunque faltó más emoción y, sobre todo, acierto con la espada a la primera. Aun así, la plaza respondió con entusiasmo y le concedieron una oreja que cerró una tarde muy festiva y generosa tanto en el palco como en los tendidos.
Jiménez Fortes: oreja y oreja.
Fernando Adrián: silencio y dos orejas.
Ginés Marín: silencio y oreja.
Así les hemos contado en directo la séptima corrida de la Feria del Toro de San Fermín 2025.
Sus dos compañeros van a salir por la puerta grande y a Ginés Marín le queda la bala de Timonel, un toro negro mulato de 595 kilos, el último de la tarde de La Palmosilla.
Le han castigado lo justo en el caballo, un toro que ha picado Guillermo Marín, el padre del torero.
Comienza la faena con muchos enganchones y trata de ajustarse con el toro en el centro del ruedo, dándole distancia.
No termina de conectar, a pesar de algunos momentos de mérito con la mano derecha muy baja.
Molinete de rodillas y dificultades para acoplarse al natural. Mejor por la derecha, donde aprovecha la bondad del toro para una buena tanda, la más lucida de la faena.
Pincha con la espada a la primera y mete una buena estocada a la segunda.
Oreja para Ginés Marín y palmas para el toro.
El quinto de la tarde de La Palmosilla se llama Mirloblanco, pesa 575 kilos y es negro.
Fernando Adrián ha comenzado la faena de rodillas, pasándose el toro por la espalda, el toro se viene de lejos y tiene mucho empuje.
Ha vuelto a recurrir a los pases de rodillas, quiere meterse a la plaza en el bolsillo como sea. No termina de conectar, naturales perdiendo muchos pasos, descolocado.
El toro se ha venido arriba y va a más, sobre todo con la mano derecha embiste con mucha codicia.
No le permite el toro mucho y se queda entre los pitones, cuando el de La Palmosilla se ha arrancado y le ha dado una voltereta tremenda, sobre todo con un golpe horrible en la cabeza. Lleva una paliza terrible, salen a atenderle y le quitan la chaquetilla, le echan agua, pero de momento no va a la enfermería, sigue en el ruedo.
Ovación de la plaza. Manoletinas para cerrar y entrar a matar, algo que consigue a la primera y el toro rueda.
Enloquece la plaza, petición masiva y mayoritaria y dos orejas para Fernando Adrián.
El toro de la merienda se llama Ardoso, es negro y es, con 595 kilos, el más pesado de la corrida junto al sexto.
Han cuidado al toro en el caballo y le ha hecho muy bien las cosas Jiménez Fortes.
Comienza la faena sentado en una silla junto a las tablas, hasta que lo saca a los medios y comienza con unos circulares sobre la mano derecha. Le falta al toro rematar más el final de los muletazos para transmitir un poco más. La gente está merendado y más distraída del toreo clásico de Fortes.
Se le revuelve muy rápido el toro en los naturales, sin pasar del todo. Desluce.
Lo intenta Jiménez Fortes con una manoletinas para cerrar la faena y conectar con los tendidos.
Mata con una estocada algo defectuosa, pero el toro rueda de forma inmediata.
Hay petición mayoritaria y corta su segunda oreja Jiménez Fortes.
Puerta grande para este torero que llevaba 10 años sin pasar por Pamplona.
El tercero de la tarde es un toro de cuernos recogidos, un poco gacho, castaño, de nombre Sucesor y de 590 kilos. Ha sacado al caballo de picar fuera de las líneas empujando hacia los medios.
Le corresponde a Ginés Marín, que brinda desde los medios de la plaza de Pamplona. Comienza la faena sentado en el estribo y poco a poco lo saca hacia los medios.
Ha dejado de llover y está disfrutando Ginés Marín con el toro de La Palmosilla, muy noble y con recorrido, especialmente con la mano derecha. Se han podido ver muletazos profundos. Aplaude Pamplona.
Ya no aguanta más el toro, que ha empezado a hacer cosas extrañas y quiere irse ya de la pelea. Termina la faena Marín muy metido en tablas, con la sensación de no haberle sacado al toro todo lo que tenía.
Pincha con la espada a la primera y mete una estocada completa a la segunda. Dobla el toro tras un aviso.
Silencio para Ginés Marín.
Ha salido al ruedo Opíparo, un toro negro de 530 kilos que corresponde a Fernando Adrián.
Sigue lloviendo en Pamplona, aunque parece que ahora escampa y más espectadores han regresado a su localidad.
Comienza Fernando Adrián llamando al toro de lejos, que se viene con buen son y embiste con mucha clase por el pitón derecho.
No ha sabido aprovechar bien al toro Fernando Adrián, que ha concluido con un recital de espadazos y fallos con la cruceta muy desesperante. No era un gran toro, pero no se ha acoplado.
Silencio para el torero.
Sensacional Jiménez Fortes en las verónicas de recibo a Tinajón, un toro negro de 515 kilos de peso de La Palmosilla. Antes lo había recibido a porta gayola, entre el alborozo de los tendidos.
Se pone a llover en Pamplona en estos momentos, muchísimo público abandona los tendidos, mientras las gradas y las andanadas están a cubierto.
Bonito quite de Fernando Adrián y muy bien la cuadrilla de Jiménez Fortes en banderillas. En el caballo se ha cuidado al toro.
Brinda al público Jiménez Fortes bajo la lluvia. Comienza la faena en los medios, con un toro que va de maravilla a la muleta. Rayos y truenos sobre Pamplona, mientras Jiménez Fortes se esmera con Tinajón,
Le ha faltado más continuidad a la faena, pero hay que entender las circunstancias, en las que toro y torero han estado por encima de lo que se puede pedir.
Muy buen toro de La Palmosilla, aplaudido en el arrastre y oreja de ley para Saúl Jiménez Fortes, que ha estado muy bien con el toro, a pesar de la lluvia que ha caído durante toda la faena.
Azul celeste y roja
Solo Roca Rey ha lidiado más toros que Ginés Marín desde que debutó en 2017. Desde su estreno en 2017 no ha faltado ningún año. De los toreros que torearon en esa edición, solo 8 lo van a hacer esta temporada: Talavante, Roca Rey, Antonio Ferrera, Manuel Escribano, Perera, Román y Rafaelillo.
Para llevar tantos años fijo en Pamplona es necesario que los triunfos acompañen. Ginés Marín lleva 6 orejas cortadas y 2 Puertas Grandes, la última en 2023. Es la primera vez que va a lidiar toros de La Palmosilla.
Ginés Marín es el segundo torero del escalafón que más toros ha lidiado en San Fermín desde 2017. Hasta ahora suma 14, dos menos que Roca Rey. Desde que debutó en 2017 no ha faltado ninguna temporada.
La oreja que cortó el pasado año en su debut a ‘Chistoso’, también de La Palmosilla, le ha llevado a repetir este año. Fue la tarde que abrió los sanfermines, junto a Diego Urdiales y Borja Jiménez, que sufrió una grave cornada en el Triángulo de Scarpa por un toro de esta ganadería que le disecó la femoral.
La carrera de Fernando Adrián cambió por completo cuando en 2021 ganó el certamen de corridas de toros promovido por la Fundación del Toro de Lidia en la Comunidad de Madrid. Por aquel entonces apenas se había vestido de luces, pero a partir de ahí todo cambió: en 2023 abrió en dos ocasiones la Puerta Grande de Las Ventas y una vez más en 2024. Este año ha cortado una oreja en la corrida de la Beneficencia, en la tarde que salió a hombros Morante.
El torero malagueño cuajó una de las tardes más importantes del pasado San Isidro. Solo el mal uso de la espada le impidió abrir la Puerta Grande. Y lo hacía tras casi cuatro años sin pisar el ruedo venteño. Pero su dimensión le sirvió para entrar a última hora en los carteles de San Fermín.
La de Fortes no ha sido una carrera fácil. Su cuerpo está lleno de cicatrices, con más de 20 percances, dos de ellos especialmente graves. El año pasado estuvo a punto de retirarse de los ruedos. Pero su triunfo esta temporada en Málaga y su tarde en Madrid le han vuelto a poner en boca de todos los aficionados.
Hacía 10 años que Fortes no toreaba en San Fermín. Su última actuación fue el 8 de julio de 2015 con una corrida de El Tajo, donde dio la vuelta al ruedo. Aquí debutó en 2012 saliendo a hombros con los toros de Fuente Ymbro y en 2013 hizo “doblete”, cortando una oreja a un toro de El Pilar y a otro de Miura.
Puede que para muchos sea una corrida más, pero para los aficionados la penúltima de San Fermín es una de esas corridas señaladas en el calendario. Un cartel compuesto por Fortes, que este año cuajó una inmensa tarde en Madrid; Fernando Adrián, uno de los jóvenes del momento y Ginés Marín, que tiene en Pamplona una de sus plazas talismán. Los toros serán de La Palmosilla.
La ganadería debutó en Pamplona en 2019 ganando el Trofeo Carriquiri con ‘Tinajón’. En la primera feria tras la pandemia, en 2022, se llevó el galardón a la mejor corrida, algo que no ha vuelto a conseguir en los dos años siguientes. Aquí ha lidiado 24 toros, con un balance alto de orejas cortadas (11) y de toros desorejados (4).
