"A la atención del Sr. Consejero de Educación D. Carlos Gimeno. Departamento de Educación del Gobierno de Navarra". Así comienza la misiva que las familias con alumnos en colegios concertados de Navarra dirigen al consejero de Educación para pedir que se mantenga la jornada continua en sus centros.
En ella, entre otras cuestiones, piden que, como ya se ha hecho en los colegios públicos de la Comunidad foral, se permita votar a los padres por el tipo de jornada que prefieren para sus hijos: partida o continua.
En este punto, cabe resaltar que a raíz de la pandemia por el Covid-19 todos los colegios de Navarra han funcionado durante el último curso escolar con la jornada continua. Muchos de ellos, además, la experimentaron por primera vez. Y en este tiempo se ha ganado defensores y detractores.
Para este curso 2022-23, que dará comienzo en tan solo unas semanas, Educación permitió que los progenitores de los niños matriculados en los colegios públicos votaran cuál era el horario que más les convenía en base a sus necesidades personales y a su vida familiar.
En dichas votaciones, la jornada continua ganó por goleada. Tanto es así, que el 84% de estos centros la mantendrá este próximo curso. Un dato que ponen de relevancia las familias de los colegios concertados en su carta.
"Somos muchos los que hemos descubierto multitud de ventajas en la jornada continua", indican estos padres en la misiva. Y valoran positivamente que esas ventajas hayan quedado "ampliamente refrendadas por los resultados de las votaciones en los centros públicos".
En dicha nota también lamentan que, en el caso de los colegios concertados, la decisión de seguir, o no, con la jornada continua ha sido puesta en manos de la dirección. "Pertenecemos a centros concertados donde la dirección ha decidido que la jornada será partida, a pesar del desacuerdo de muchas familias", reconocen.
Y opinan que "nadie se ve perjudicado con la jornada continua". ¿La razón? "Las extraescolares permiten salir a la misma hora que en jornada partida", apostillan.
Precisamente, uno de los argumentos que aluden a favor de la jornada continua es la actual coyuntura económica. A su juicio, este horario permite que las familias puedan ahorrarse algunos costes añadidos. Por ejemplo, el comedor o las extraescolares.
"Los gastos mensuales en alimentación, vivienda, movilidad no dejan de aumentar, tensionando las economías de nuestros hogares, y a esto le tendremos que sumar desde septiembre el sobrecoste escolar que supone la jornada partida que en algunos casos llega a ser inasumible", lamentan las familias que han elaborado la nota.
Insisten en que con la jornada partida, por ejemplo, a la mayoría de las familias no les queda más remedio que pagar el comedor. Un servicio que, según comentan en la carta, en algunos caso se ha encarecido hasta 150 euros mensuales por niño con respecto a cursos anteriores.
A su juicio, muchas de las familias podrían permitirse con la jornada continua no inscribir a sus hijos en el comedor, con su consiguiente ahorro para la economía familiar.
De igual forma, recuerdan que terminar la jornada educativa a las 14 horas, en vez de a las 17 horas, está más en consonancia con "las actuales medidas de ahorro energético".
Por todas esas razones, en dicha carta dirigida al consejero de Educación, solicitan a Gimeno que mantenga la jornada continua en sus centros con el fin de apoyar la economía familiar y fomentar el ahorro energético.
Y también le instan a favorecer que la nueva normativa asegure su derecho a votar libremente la jornada que desean para sus hijos, escolarizados en centros concertados de Navarra.
Dicha petición se trasladó al departamento de Educación el pasado viernes, con 2.515 firmas. Las personas firmantes indicaron su nombre, apellidos y el centro en el que están matriculados sus hijos. Ya solo en los primeros tres días de la recogida de firmas, se registraron 1.910 de las mismas.
