La construcción de un nuevo ramal de incorporación a la autopista A-15 en Izurdiaga ha comenzado a tomar forma tras la adjudicación de las obras por parte del Gobierno de Navarra.
Se trata de un proyecto largamente esperado en la zona, que permitirá a los vecinos acceder de manera más rápida a la vía de alta capacidad en dirección a Pamplona, aliviando además el tráfico que hasta ahora se concentraba en los núcleos urbanos.
La intervención, que supondrá una inversión de 1,2 millones de euros, transformará los desplazamientos diarios y mejorará la seguridad vial en una de las entradas más transitadas de la comarca. Con un plazo de ejecución de cuatro meses, los trabajos han sido encargados a la empresa Excavaciones Fermín Osés, según figura en el portal de contratación pública.
El nuevo ramal tendrá una longitud total de 815 metros. Los primeros 371 se construirán en calzada única y el resto servirá de carril de aceleración hasta enlazar con la autopista, en el punto kilométrico 111.
La conexión arrancará desde la carretera NA-7010, en el kilómetro 21,4, aprovechando la variante de Izurdiaga levantada en 2016. El diseño incluye además una glorieta con una calzada de ocho metros de ancho y una isleta central de 20 metros de diámetro.
El acceso beneficiará de forma directa a los habitantes de Izurdiaga, Erroz, Urrizola e Irurzun, que ganarán en comodidad y rapidez a la hora de incorporarse a la A-15. Al mismo tiempo, se reducirá la densidad de vehículos que hoy atraviesa el centro urbano de Izurdiaga, lo que se traducirá en una mayor fluidez del tráfico y una disminución de riesgos.
El proyecto había sido licitado ya en 2023 con un presupuesto de 1,3 millones, y su adjudicación actual confirma el compromiso del Ejecutivo foral con la mejora de las infraestructuras viarias en la comarca.
