La Audiencia Provincial de Navarra ha condenado a dos años de prisión a un hombre por abusar sexualmente de una amiga de 16 años en una localidad cercana a Pamplona. La Sección Primera ha dictado la sentencia tras un acuerdo entre la Fiscalía y la defensa, que ha permitido aplicar las atenuantes de drogadicción, reparación del daño y dilaciones indebidas.
El acusado, que se encontraba en prisión provisional, recuperó la libertad el día del juicio, celebrado el 24 de septiembre de 2025. La resolución incluye además una prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima durante ocho años, así como la obligación de cumplir tres años de libertad vigilada.
En concepto de responsabilidad civil, el condenado deberá indemnizar a la menor con 3.000 euros por los daños morales, de los cuales 2.000 euros ya fueron abonados antes del juicio.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 2 de abril de 2022, cuando el procesado coincidió con la joven en una discoteca del barrio de San Juan de Pamplona. Pasadas las cuatro de la madrugada, las amigas de la víctima abandonaron el local y ella decidió quedarse con el acusado y un amigo suyo.
Sobre las siete de la mañana, la menor optó por dormir en casa del procesado para evitar problemas con su familia al llegar tarde y tras haber consumido alcohol. Allí, la chica se tumbó con la ropa puesta —un vestido y un pantalón prestado por el hombre— y el acusado se acostó junto a ella en la misma cama.
Cuando la víctima dormía, el procesado la desvistió y la penetró vaginalmente, provocando que se despertara sobresaltada y lo apartara. Según la sentencia, el condenado, que presentaba un leve menoscabo de sus facultades por consumo de alcohol y sustancias estimulantes, pidió perdón de inmediato por lo ocurrido.
Durante la instrucción del caso, tramitada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Aoiz, se produjeron paralizaciones procesales no imputables al acusado entre octubre de 2022 y marzo de 2024, motivo por el que se aplicó la atenuante de dilaciones indebidas.
La Audiencia ha decidido suspender la ejecución de la pena siempre que el condenado cumpla las condiciones impuestas: no delinquir durante tres años, abonar los 1.000 euros restantes en un plazo de 20 meses, seguir un programa de deshabituación a las drogas, participar en un curso de educación sexual y realizar 144 jornadas de trabajos en beneficio de la comunidad.
