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Blog / La cometa de Miel

La Javierada y la Copa del Rey de Osasuna

Por Pablo Sabalza

Si no consigo barco, iré nadando (San Francisco Javier).

Al menos, una vez en la vida. 

Que es de bien antiguo, se sabe, que en el siglo XIII y XV tanto los galanes caballeros como los campesinos más enamorados, con su espada tendida o su calado sombrero, se echaban a los caminos simulando en la noche de marzo ser fantasmas al paso para, entre una estrella y un sueño, entre un trocito de luz y una migaja de luna, llegar al castillo de Javier y orar ante el Cristo de su capilla.

Pero vayamos a lo que nos interesa que no es cosa menor, pues es ganar la Copa del Rey y, apenas, a dos pasos nos queda.

Para ello, mis queridos amigos de navarra.com, nos tenemos que desplazar al año 1633 cuando un padre jesuita llamado Marcelo Mastrelli que no Mastroniani, sanó, al parecer, por la intercesión de nuestro patrón San Francisco Javier. 

Cuentan los más viejos del lugar que la Novena de la Gracia, marco en el que se desarrolla esta peregrinación al santuario javeriano, tuvo su origen en este milagro atribuido al Santo.

Se dice que en estos nueve días (Novena de la Gracia) que se enmarcan del 4 al 12 de marzo, si se reza “pidiendo una gracia especial, si nos conviene”, se cumple.

Y, ¡ay, amigos y amigas! Convenir, nos conviene.

Si este fin de semana pasado tuvo lugar la primera ‘Marcha a Javier’ y el próximo sábado se desarrollará la segunda, digo yo que dentro del plazo de petición estamos.

Y es aquí donde quería llegar.

Para aquellos que por distintos motivos no podemos realizar esta peregrinación, bien sea por unos casos u otros, (asuntos familiares, desplazamiento a nuestra tierra, catarros varios…) interpreto que el patrón nos dará una concesión que no es otra que hacer la Javierada cuando se pueda.

Mas eso sí, vaya mi petición de gracia especial por delante solicitando al Santo solamente una cosa, una cosa chica para él pero muy grande para todos los navarros.

Verás, Javier, porque te puedo llamar Javier, ¿verdad? Yo te pido que lleguemos a la final de la Copa del Rey con nuestro equipo, Osasuna. Y si llegamos, que la ganemos.

Yo sé que son dos peticiones, pero para ti esto no es nada.

Estoy convencido de que todos tus paisanos que residen en Navarra o fuera de ella, creyentes o no, peregrinos o no, se echarían ahora mismo a caminar, como un día lo hicieron tanto los galanes caballeros como los campesinos más enamorados, si esta petición, para ti muy chica, se cumpliera.

Además, el presidente de Osasuna es de Sangüesa, y Sangüesa y Javier son primos hermanos. 

Queremos vivirlo al menos una vez en la vida. 

Aquí tienes un peregrino más a Javier, gane o no gane. Pero que gane.

Ahí va mi petición.

Entre una estrella y un sueño, entre un trocito de luz y una migaja de luna.

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