- domingo, 08 de diciembre de 2024
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Que el partido socialista que lidera en Navarra Txibite es un miserable no cotiza ya en las casas de apuestas. Eso es ya algo indiscutible, como que la camiseta de Osasuna es de color rojo, o que la mejor ciudad del mundo es Madrid -que se lo digan a Koldo Martínez, que llevaba media vida intentando que le votaran para largarse a Madrid y al final, ha tenido que regalárselo el parlamento de Navarra designándole como senador autonómico, para que pueda cumplir su sueño-.
Lo que ha empezado a ser motivo de apuesta es hasta qué punto de degradación moral puede llegar Txibite y su partido. El gobierno de Txibite es un buque al que tarde o temprano se lo acabará comiendo el escorbuto inmoral que le desborda ya la sentina. Los envites están abiertos, amigos lectores, pueden ustedes llamar y dejar la fecha final del descarrilamiento del gobierno socialista-nacionalista.
El otro día, por ejemplo, en Leiza, ante la protesta de la viuda de un guardia civil asesinado por el terrorismo nacionalista vasco por los pactos de Txibite con el partido de la eta, el PSN se dedicó a deslizar la idea de que en realidad no lo decía por ser una víctima de eta sino porque era una afiliada de Vox.
En vez de víctima de eta pongan, por ejemplo, mujer maltratada o mujer violada para ver la repugnancia del argumento que está soltando el PSN. Quedaría algo más o menos así de vomitivo: bueno, el problema no es la violación, es el desgaste político al que esta mujer quiere someternos porque es de tal o cual partido. Txibite y su cuadrilla de chalados socialistas han perdido definitivamente la vergüenza. Ellos sabrán.
Ayer, la infamia continuó. Los socialistas y el partido de la eta votando al mismo candidato para la presidencia de la mancomunidad de la comarca de Pamplona.
Otro plazo más del pago que los batasunos exigieron para hacer a Txibite presidenta. Y lo que nos quedará por pagar... porque quien paga una vez a la mafia ya tiene que pagar siempre.
He de confesar que este pacto entre socialistas y el partido de la eta no lo había imaginado jamás. Pensé que nunca iba a ocurrir, que nunca los socialistas iban a dejar el constitucionalismo y la decencia para echarse al monte con el partido que justifica asesinatos y homenajea a etarras, pero el PSOE es como esa última copa que te tomas una noche de juerga y que te revienta el hígado. Nunca defrauda. Pasó y fue para echar la pota. Están desatados. Los socialistas han perdido completamente la chaveta.
El otro día vi en el museo del Prado El pelele, la obra de Goya, y me acordé de Txibite. Un muñeco absurdo y desfigurado, irrisorio, histriónico, grotesco, sometido a los manteos de cuatro personas, como los vaivenes a las que le someten a Txibite los nacionalistas de las nueces de sangre y el partido de la eta.
Esta es la forma en la que Txibite va a pasar a la historia de Navarra, la de una pelele. Que lo disfrute, porque eso es para toda la vida. Y eso es todo.