- sábado, 14 de diciembre de 2024
- Actualizado 08:46
Partido este con demasiadas emociones e ilusiones; todas ellas mezcladas en un terreno lleno de deseos rojillos, baja forma de los blancos y rodeados de barro valenciano por todos los lados. A pesar de ello no deja de ser un encuentro interesante para todos antes de su comienzo.
Un Osasuna con la moral arriba frente a unos campeones con el ánimo a medio camino, no sabíamos hacia dónde se inclinaría la balanza deportiva: todo podía ocurrir, era solo una esperanza. Osasuna con su alineación habitual contra un Real Madrid estelar, pero sin haber demostrado todo su poderío esta temporada, ponía en duda el resultado final antes de su comienzo.
Las dudas se comenzaron a diluir en cuanto el encuentro dio comienzo, se veía un Osasuna aparentemente bien plantado, pero sin llegar a poner en peligro la portería madridista; 7 saques de esquina en los primeros 14 minutos a favor de los blancos y un par de lesionados, llegamos al minuto 33 donde Catena da el paso atrás demasiado pronto y Vinicius se encarga del resto (1-0).
Una jugada de Brayn por la banda nos levanta el ánimo, pero sólo fue un espejismo, todo siguió igual hasta el minuto 41 en el que un descarado defensa del Castilla “Asencio” pone un balón a la espalda de la defensa Osasunista en el que Belligan no necesita demasiado para golear a Sergio, este gol es del defensa mas que del delantero y de la defensa rojilla que no calculó bien ni la colocación ni la cobertura necesaria en estos lanzamientos.
En la segunda parte me esperaba algún cambio en Osasuna por aquello de “ya está todo hecho”, pero D. Vicente no lo entendió así y siguieron los mismos con la misma fórmula y la misma ausencia de juego ofensivo.
En la segunda parte todo fue coser y cantar para el Real Madrid, la calidad blanca frente al esfuerzo rojillo y tener que multiplicarse más de lo habitual para que los contrarios tropezaran con el mayor número de obstáculos posibles vestidos de rojo; pero la diferencia era tan evidente que no tenemos mas que dar la mano a los del Bernabeu y hasta la próxima en el Sadar, que será otro cantar.
Tengo que destacar el 3-0 como gol de Lunin, aunque lo metiera Vinicius y el 4-0 gol de Boyomo, aunque también lo metiera Vinicius; el central osasunista hace muchas cosas bien pero ya ha cometido algunos errores en defensa que nos han costado goles, tendrá que meditar o espabilar un poco más (o las dos cosas a la vez).
De cualquier forma, este tipo de encuentros ya nos lo sabemos y más si nos encontramos con equipo merengue enrabietado por los resultados anteriores. Este resultado no debe influir en nuestro ánimo Osasunista, ya que para conseguir puntos de estos encuentros, habría de salir todo perfecto a los rojos y casi todo mal a los blancos; pero los osasunistas nos vamos contentos con nuestros 21 puntos en la clasificación y descansar tranquilos en este parón liguero.