Vecinos de Leiza han organizado para este miércoles un homenaje en memoria del cabo de la Guardia Civil Juan Carlos Beiro, asesinado por ETA el 24 de septiembre de 2002 mediante una bomba-trampa. El acto tendrá lugar en el mismo punto donde los terroristas colocaron el artefacto que acabó con su vida.
La jornada comenzará a las 13 horas con una misa en la iglesia de San Miguel de Leiza. A continuación, familiares, vecinos y autoridades participarán en una ofrenda floral en recuerdo de Beiro, como cada año desde su asesinato.
Mañana se cumplirán 23 años del atentado, un crimen que sigue sin resolverse judicialmente. El caso forma parte de los 379 asesinatos de la banda terrorista que aún permanecen pendientes de esclarecer. En 2020, la Audiencia Nacional procesó al que fuera último jefe militar de ETA, Mikel Carrera Sarobe ‘Ata’, junto a otros tres miembros de la organización, por su presunta implicación en la colocación de la pancarta-bomba que también dejó heridos a cuatro guardias civiles. Sin embargo, el procedimiento se encuentra estancado por la falta de cooperación judicial con Francia, país donde residen algunos de los acusados.
La viuda de Juan Carlos Beiro, María José Rama, ha expresado en numerosas ocasiones su indignación por las sucesivas prórrogas en la instrucción y ha reclamado a los ministros de Justicia de España y Francia que desbloqueen de inmediato el proceso para no prolongar el sufrimiento de las víctimas.
Con este nuevo homenaje, los vecinos de Leiza buscan mantener vivo el recuerdo y la memoria de Beiro, y junto a él, de todas las víctimas del terrorismo de ETA.
