El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha destacado este jueves en Pamplona la relevancia del periodismo en la lucha contra el discurso terrorista, coincidiendo con la reciente aprobación por parte del PSOE de una ley que facilitará la excarcelación de presos de ETA antes de que cumplan sus condenas.
Este grupo político ha llegado a un acuerdo con los proetarras de Bildu, lo que beneficiará a más de 40 presos con antecedentes de asesinato, al reducir sus penas y facilitar su liberación, como parte de las condiciones exigidas por Bildu para continuar brindando su apoyo.
Grande-Marlaska participó en la inauguración de la 'III Jornada Contra el Terror: las historias detrás de las historias', un evento organizado por la Universidad de Navarra, la Fundación de Víctimas del Terrorismo y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, celebrado en la Facultad de Comunicación de dicha universidad.
El acto contó con la presencia de varios representantes, entre ellos, la vicepresidenta segunda y consejera de Memoria y Convivencia, Ana Ollo; la delegada del Gobierno, Alicia Echeverría; Juan Benito, presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo; Florencio Domínguez, director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo; Carlos Jesús Moreno, comisario jefe de la Policía Nacional; y Jesús Miguel Barbero, coronel jefe de zona de Navarra de la Guardia Civil.
En su discurso, el ministro enfatizó la necesidad de "recordar para no repetir, recordar para educar", subrayando la importancia de construir una sociedad libre y responsable. Expresó su "enorme alegría" de compartir el inicio de estas jornadas con los "futuros periodistas", destacando que son ellos quienes mejor comprenden la responsabilidad de ejercer el periodismo con honestidad y rigor.
Grande-Marlaska indicó que los medios de comunicación y las redes sociales representan "un poderoso altavoz", lo que conlleva beneficios, pero también riesgos importantes. "Por esas amenazas que no podemos ignorar, son esenciales iniciativas como esta jornada para abordar el terror", subrayó.
El ministro advirtió que "el terrorismo es el mayor enemigo de la libertad", que se aprovecha de los espacios de libertad para difundir su mensaje y amenazas. Explicó que los terroristas utilizan diferentes estrategias para amplificar la propaganda de sus actos.
Por ello, instó a los periodistas a "realizar su trabajo sin convertirse en canales de difusión de los violentos y sus discursos de odio". "Es fundamental explicar el terrorismo sin justificar la acción criminal", remarcó.
A los estudiantes, les animó a desarrollar una profesión que respete los valores democráticos y destacó la importancia de los códigos deontológicos para un ejercicio responsable del periodismo. Insistió en la necesidad de resaltar la "inocencia de todas las víctimas", así como en evitar proporcionar información que pueda beneficiar a los terroristas o utilizar un lenguaje que imite el de los violentos.
Grande-Marlaska advirtió sobre la "mimetización de la violencia" en la sociedad, que ha llevado a una desensibilización e incluso a la romanticización del dolor. Defendió que la presencia de las víctimas en los medios es "una herramienta valiosa para contrarrestar esta tendencia y deslegitimar el terrorismo".
El ministro también subrayó que la estrategia nacional contra el terrorismo promueve el testimonio de las víctimas como una forma de prevenir la radicalización, ya que su experiencia fomenta la empatía y ayuda a combatir el discurso de odio. Destacó el proyecto 'Memoria y Prevención del Terrorismo' del Ministerio del Interior, que busca concienciar a los estudiantes de Secundaria y Bachillerato sobre las devastadoras consecuencias del terrorismo.
Por su parte, María Jiménez, vicedecana de Ordenación Académica de la Facultad de Comunicación, enfatizó que la universidad se esfuerza por asegurar que sus estudiantes "no salgan de las aulas como entraron", instándoles a explorar el fenómeno del terrorismo de manera más profunda.
Las jornadas se centran en "historias que quedaron al margen de los grandes titulares". Se proyectará la película 'La Infiltrada', que representa el asesinato de Gregorio Ordóñez, alumno de la universidad, quien decidió hacer política a pesar de convivir con la amenaza de la muerte.
Además, se abordarán los desafíos de contar la historia del terrorismo, un proceso que no es sencillo. "Ante la duda razonable hay asideros", recordó, haciendo mención a David Beriáin, quien fue asesinado en Burkina Faso.
