Felicidad Vicente Condori, 'Feli', es una boliviana de 40 años, que lleva 23 años en Pamplona, y desde el mes de octubre lleva las riendas de la Bodega Ñúñez en el barrio de la Milagrosa.
Es un bar que está situado en la esquina de las calles Guelbenzu e Isaac Albeniz. Muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en este apartado de comercio local en la capital navarra.
Como es el caso, por ejemplo, de la taberna Albeniz especializada en las tortillas de patata de Pedro Jesús Sanz, o la bodega Leyre que dirige Alberto Urralburu con su comida tradicional de toda la vida.
En cuanto a los almuerzos de San Fermín, 'Feli' asegura tajante: "Para el mes de enero ya lo teníamos lleno. No hay sitio pese a que la gente sigue llamando. Muy contenta. A ver lo que pasa. Para el día 6 y 7, imposible. Los demás días igual hay algún sitio, pero está todo lleno. Todo completo".
En cuanto a los almuerzos, están entre los 12 y los 15 euros por persona: Lo que más se demanda son huevos fritos con chistorra, tocino fresco, jamón, lomo..., además de callos, menudicos, ajoarriero, manitas de cerdo, toro estofado, costillas de cordero lechal o sepia a la plancha.
Las comidas en San Fermín, con un menú especial, cuestan 33 euros por persona y solo han subido 1 euro respecto al año pasado. Los primeros platos a compartir son los siguientes: aperitivo de la casa, chorizos a la sidra, jamón ibérico con tostadas de tomate y aceite de oliva, y ensalada de tomate rosa con ventresca.
Los segundos platos, a elegir, son los siguientes: chuleta de 600 gramos con pimientos confitados (suplemente de 6 euros), paletilla de cordero con guarnición (suplemento de 6 euros), costillas de cordero lechal, confit de pato al Pedro Jiménez, rabo al vino tinto, ajoarriero, y rapito con patatas panaderas al estilo Orio.
De postre, a elegir: cuajada con nueces y miel, tarta de hojaldre, cuoulant con helado, sorbete de limón al cava, flan de huevo con nata. se incluye vino crianza, gaseosa, sidra o agua.
'Feli' comenta acerca del éxito de su almuerzo sanferminero: "Por un lado es una tranquilidad porque vamos a trabajar bien y por otro lado da un poco de miedo porque son mis primeros Sanfermines aquí, pero tampoco es novedad los Sanfermines para mí", señala la dueña del bar.
La bodega Núñez ofrece también una terraza muy acogedora con mucha sombra: "Están aquí todos los del barrio que son gente de toda la vida. Encantada. Desde que llegué me acogieron muy bien. Tenía miedo de la novedad pero ya me he hecho a todo. La gente es muy amable".
La bodega Núñez abrió sus puertas en 1969 con el matrimonio formado por Joaquín Núñez y Mari Carmen Lizaso. Posteriormente, lo han llevado sus hijos Carmen y José hasta el pasado mes de octubre cuando se produjo la venta del bar
La actual dueña, Feli, comenzó a trabajar en la hostelería hace 18 años en Burlada y en Ripagaina hasta que compró la Bodega Núñez: "Toda la plantilla se ha quedado menos José y sigue todo igual. Estoy muy contenta. Al principio era diferente a lo que estaba acostumbrada, pero estoy encantada aquí desde octubre del año pasado".
Felicidad Vicente ya se siente como una pamplonesa más: "Llegué a Pamplona con 18 años y me encanta. Es como mi país. Tengo dos hijos que nacieron aquí y he hecho la vida aquí", concluye.
