ELA ha convocado cinco días de huelga en Knorr-Bremse (Icer Rail) con el objetivo de negociar los ritmos de productividad en la planta, que consideran "excesivos" y las consecuencias de los mismos.
Miembros de la plantilla se han concentrado este jueves ante el Parlamento de Navarra, convocados por este sindicato, para criticar que "las condiciones productivas impuestas en los últimos meses por la dirección han aumentado las cargas de trabajo y los ritmos excesivos, conllevando riesgos de lesiones reconocidos por el ISPLN".
En un comunicado, ELA ha criticado que, además, "no tiene en cuenta la obligación de descansos ergonómico recogidos en las evaluaciones de riesgos".
Según ha explicado, desde la mitad de 2023, la empresa ha implantado "un sistema de producciones mínimo exigible con el que la mayoría del comité no está conforme". Asimismo, ha criticado que, "derivado de ello", la empresa "ha despedido injustamente a tres trabajadores".
La mayoría del comité de empresa ha solicitado reuniones con la dirección para "estudiar conjuntamente" estas condiciones productivas, "incluso con mediación del ISPLN, pero han sido rechazadas por parte de la empresa en su totalidad".
Por ello, el sindicato ha convocado una huelga de cinco días con el objetivo de "negociar los ritmos de productividad y las consecuencias derivadas de esos ritmos". Asimismo, ha interpelado al Gobierno de Navarra "porque también es el responsable de que las personas que trabajan en la empresa tengan unas condiciones dignas y no pierdan la salud cada día en el trabajo".
