- domingo, 08 de diciembre de 2024
- Actualizado 16:11
Hoy es el día del Traslado de Nuestra Señora de la Soledad, la Dolorosa, y los hombros de la Hermandad de la Paz y Caridad, que desde 1883 portan la imagen de la Virgen, no procesionarán con su Madre por las calles de Pamplona. Este año no llevarán por las calles Mayor, San Saturnino, plaza Consistorial, Mercaderes y Curia las peticiones y promesas que le han hecho durante el último año y no sentirán el peso físico de su amor y compañía hasta su llegada a la Catedral. Pero sí habrá Traslado, a las nueve de la noche, como siempre.
Este año los hombros de la Hermandad trasladarán hacia la Virgen Dolorosa los nombres de todos y cada uno de los fallecidos por causa de la pandemia del Coronavirus, de los hombres y mujeres contagiados que viven en aislamiento y soledad la enfermedad, y de los familiares que no pueden acercarse a ellos a darles un beso de cariño y consuelo y sufren la distancia con resignación.
Trasladaremos, hacia Ella, el esfuerzo, dedicación, valentía y orgullo de los profesionales sanitarios que de manera titánica luchan por la salud de todos nosotros aun jugándose la suya propia. Médicos, enfermeras, farmacéuticos, auxiliares, personal de la limpieza, celadores, investigadores, protección civil, conductores y auxiliares de ambulancia, SOS Navarra 112, en definitiva, todos los que nos atienden de una manera u otra ante nuestra llamada o visita de urgencia.
Llevaremos en nuestros hombros, camino de la Pascua, la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Guardia Civil y Policía Nacional, Policía Foral, Policías locales, los tres Ejércitos de tierra, mar y aire, la UME y a los vigilantes de seguridad, que nos vigilan y protegen contra los insolidarios y aquellos sin escrúpulos que se aprovechan de nuestra debilidad.
Elevaremos hacia la Virgen las oraciones, desvelos y acompañamiento del Papa Francisco, de nuestro Arzobispo y Obispo Auxiliar, de los sacerdotes de nuestras parroquias, religiosos y conventos de vida contemplativa, que nos mantienen esperanzados y nos señalan el camino de la Pascua, a la que llegó Jesús después de su caminar sufriente.
Portaremos en nuestros corazones a todos los profesionales que nos hacen más llevaderos estos días de confinamiento. A quienes nos atienden en el supermercado, panadería, tiendas de alimentación y gasolinera, a los periodistas que nos mantienen bien informados, y a quienes limpian nuestros portales, oficinas y calles y lugares comunes, porque se exponen también, mucho más que nosotros, al peligro del Covid-19.
En el Traslado de este año, la Dolorosa de Pamplona, estará acompañada de nuestras Hermandades hermanas, de la Pasión del Señor, del Rocío, Cereros y chocolateros, Labradores, Carpinteros y de Jesús de los Milagros, las Hermanas de la Soledad, las Cortes de San Fermín, Santa María la Real, Virgen del Camino y Virgen del Pilar, el Rosario de los Esclavos, del Excmo. Ayuntamiento de Pamplona, titular del Paso y de la imagen, con su alcalde y concejala Delegada de Cultura a la cabeza, y de tantas y tantos fieles que miran cada día a su Madre y no quieren dejarla sola. Y oiremos, como no, la música de nuestra querida Pamplonesa. Nadie va a faltar al Traslado.
Y de manera especial, los Hermanos y Hermanas de la Paz y Caridad, arrimaremos el hombro para acercar al cobijo de la Virgen Dolorosa a quienes están en primera línea del frente, a todos nuestros mayores, a nuestros padres y madres, abuelos y abuelas, a todos aquellos que recogidos en las Residencias y Centros de mayores están sufriendo la crueldad del virus y son más indefensos. Vamos a empujar mucho por ellos, no vamos a desfallecer por el peso de esta pandemia, ante la adversidad sacaremos fuerzas de donde no las tengamos, pero no les vamos a dejar solos. Hoy, el Traslado, va, sobre todo, por ellos.
Nuestro lema nos sostiene y nos da la fuerza suficiente: Ten valor y confía en Dios
¡Virgen Dolorosa, ruega por todos nosotros!
Eradio Ezpeleta Iturralde es Prior de la Hermandad de la Paz y Caridad