La Comparsa de Gigantes ha entrado a las 11.45 horas a la iglesia, donde ha sido recibida con un fuerte aplauso por parte de todas las familias y niños que ahí les esperaban.
Javier Leóz, párroco de la iglesia, ha destacado que "un portador de un gigante es lo mismo que el alma para una persona". "El alma da el habla a una persona, al igual que un portador hace que un gigante baile y hable", ha señalado.
Ha sido el último acto institucional del Año Jubilar de San Fermín. En el lugar han entrado todos los portadores y, rodeados de aplausos, han realizado dos bailes.