La empresa navarra Luminosos Arga ha decidido poner a disposición de la población sus servicios y recursos, dadas las necesidades que han surgido por la pandemia del coronavirus.
Se trata de una pyme con 19 empleados en plantilla que durante años se ha dedicado a los rotuladores e impresiones digitales y que ahora pone su granito de arena en la lucha contra el virus fabricando máqscaras protectoras para sanitarios. Hasta este lunes habían sido entragados más de 3.000 equipos, que se han donado en comunidades como Navarra, Madrid y Castilla y León, entre otras.
"Nos dimos cuenta que, ante la situación que ocurre en el mundo, nosotros teniamos los equipos y la capacidad para hacer máscaras protectoras para los sanitarios. Uno de los socios diseñó un modelo con el acetato con el que que venímos trabajando hace un tiempo, y así las empezamos a producir", relata Myrna Urrutia, coordinadora de las comunicaciones de la campaña e hija del gerente de la compañía, Jesús Urrutia.
El modelo que Luminosos Arga ha fabricado se diferencia de las mascarillas impresas en máquinas 3D, las cuales han sido famosas durante este tiempo de estado de alarma, porque son hechas con materiales distintos.
La visera está fabricada en metacrilato, un tipo de plástico de 4 milímetros que se corta con una máquina de láser. El frontal, que evita el contacto con el ambiente, es acetato de 300 micras, que se recorta con una fresadora. A estos dos materiales se les añade caucho para la frente y goma para sujetarla.
Urrutía explica que "hay muchos enfermos. Todos ayudamos como podemos y con lo que tenemos. Esto que hacemos es un intento por ayudar a todos aquellos que están en la primera fila de la línea de fuego luchando, que son muchos".
VISIBILIDAD DE LA CAMPAÑA
La última semana de marzo empezaron la producción. Boca a boca, lograron darse a conocer en los hospitales y centros sanitarios que tienen actualmente necesidades de equipos. Además, algunos conocidos fueron aumentando la red de contactos y, finalmente, a través de redes sociales, le dieron el último impulso a la visibilidad de la campaña.
Los primeros envíos fueron 2.500 unidades para el Servicio Navarro de Salud; 230 para el personal de limpieza de centros socio sanitarios de Auzolan; 200 a IFEMA; 100 al Hospital Universitari Bellvitge y a San Fermín Express; 50 al Hospital Can Ruti de Badalona, al Hospital de Palamós, al Hospital García Orcoyen, al Centro Residencial Luz de Estella-Sanitas Mayores, Iman Temporing y Farplus; y 30 a Landare.
"Nos han llegado historias terribles debido a toda esta situación que nos hace pensar. Por ejemplo, algunos sanitarios en Madrid están teniendo que atender a los enfermos con bolsas de basura en la cabeza porque no tienen ni materiales ni medios para disponer de otro equipamiento", reflexiona Urrutía.
Por ello, el pasado jueves se realizaron nuevos envíos, entre los cuales estaba la Guardia Civil y la Comunidad de Madrid. "He hablado con los que recibieron el envío de Madrid, y ahora entran en un proceso para analizar si realmente son pertinentes para sus necesidades antes de repartirlas en los centros sanitarios", afirma Urrutia.
EQUIPO ESPECIAL
Según las declaraciones de Luminosos Arga, la Policía Nacional es uno de los sectores más vulnerables ante el virus y con menos recursos para equiparse. "Ellos deben ir a recoger a los muertos por el coronavirus y, para eso, necesitan equipo especial, que no tienen".
El 2 de abril, este empresa navarra envió 600 mascarillas a la Guardia Civil de Navarra y esperan poder seguir ayudandoles, no solo a los de la Comunidad foral, sino a los de otras comunidades que se han visto muy afectados por la pandemia.
Uno de los mayores retos para Luminosos Arga ha sido mantener los suficientes recursos y conseguir la materia prima. Algunos negocios locales de Pamplona han sido proveedores, pero otros de los materiales, que son de carga pesada, están siendo más complicados de adquirir y más costosos que su precio hanitual.
Son muchas las necesidades que hay actualmente y pocos los recursos. En un principio, la compañía realizó 2.552 pantallas con recursos y materiales propios, pero la situación se volvió insostenible.
COSTE DE SEIS EUROS
Cada una de las máscaras tiene un coste neto de seis euros, y esto sin tener en cuenta la mano de obra, el transporte y los gastos de servicios en el punto de fábrica. "Las empezamos a realizar con el material que teníamos en stock por compromiso con la comunidad, pero cada día es más difícil mantenerlo por nosotros mismos", aclara la responsable.
Dado el coste y la necesidad de mucho más equipo, la compañía inició los últimos días de marzo un crowdfunding. El objetivo que se pusieron fue alcanzar los 90.000 euros para fabricar un total de 15.000 pantallas. Hasta este lunes, han conseguido recaudar 9.080 euros.
Por esta razón, la empresa remitió un comunicado oficial la semana pasada, informando a los donantes que habían tenido que detener la producción hasta alcanzar lo suficiente para construir 450 unidades más.
Sin embargo, el viernes 3 de abril, ante la duda de alcanzar el objetivo de la semana, recibieron una donación de 800 euros por parte del Club Deportivo Rioseco de Castilla y León. Así, progresivamente, la cuenta ha ido aumentado.
"MUCHA NECESIDAD"
La decisión actual de la empresa es que con cada 3.000 euros que aumente el fondo de donaciones se irán haciendo más pantallas. Por ahora, todos aquellos que quieran pueden continuar colaborando con el importe que quieran.
Myrna Urrutia hace un llamamiento a la comunidad para que "sean conscientes de lo díficil de la situación que se vive. Hay mucha necesidad, por lo que pido que colaboren con lo que cada uno pueda, sino es con nosotros, con otros. Pero estando juntos, venceremos".
