El Gobierno de Navarra ha reforzado la presencia de seguridad en los centros de salud con el objetivo de garantizar la tranquilidad de profesionales y usuarios en el horario de tarde. Desde el lunes 22 de septiembre, todos los centros de la red de Atención Primaria que ofrecen servicio vespertino cuentan con guardas jurados, que rotan entre las instalaciones desde las 15 o 18 horas, según el horario de cada centro, y hasta las 20 horas.
La medida se ha puesto en marcha tras el aumento de las agresiones a sanitarios en los últimos años. Solo en 2024 se notificaron 754 casos en el Servicio Navarro de Salud. Además, en los últimos meses se han registrado incidentes en el ámbito de la Primaria. El consejero de Salud, Fernando Domínguez, ya advirtió a comienzos de año que “es prioritario que todos los trabajadores y usuarios se sientan seguros y puedan realizar su trabajo o acudir a sus citas con total tranquilidad y confianza”.
Este refuerzo se une a otras acciones ya adoptadas en el Hospital Universitario de Navarra (HUN), como la instalación de un Circuito Cerrado de Televisión (CCTV) con 224 cámaras de vigilancia, entre ellas perimetrales y lectoras de matrículas. A ello se suman los programas de formación en autoprotección, cursos de desescalada verbal y no verbal, así como la difusión del protocolo de actuación en caso de agresión, que detalla la figura del Interlocutor Policial Sanitario (IPS).
También continúan operativos los sistemas de alarma y alerta inmediata, como el botón de seguridad en los ordenadores de sobremesa de Atención Primaria y Salud Mental, además de otros dispositivos (pulseras, botones físicos) que permiten recibir ayuda rápida de compañeros cercanos en caso de episodios violentos.