La residencias de mayores de Navarra registran en estos momentos 28 casos positivos por Covid-19, con tres personas hospitalizadas, y se han producido en los últimos días dos fallecimientos. Uno se produjo el pasado domingo en la residencia San Jerónimo de Estella y otro el lunes en la residencia de Olite. La Comunidad foral no registraba fallecimientos en sus residencias desde el pasado mes de febrero.
Así lo ha dado a conocer la consejera de Derecho Sociales, Mari Carmen Maeztu, quien, a preguntas de los periodistas, ha señalado que no se contempla adoptar nuevas medidas en estos centros. Y ha afirmado que la situación en las residencias "es muchísimo mejor" respecto a otras olas de la pandemia "gracias a la vacunación y el impacto ha sido mucho menor".
La consejera ha explicado que, en estos momentos, hay cinco residencias de mayores de la Comunidad foral que contabilizan casos de Covid-19 entre sus usuarios. En total, hay 28 casos positivos, tres de ellos hospitalizados, cuatro en recursos intermedios y 21 permanecen en la residencia, la mayoría sin síntomas.
Por otro lado, hay cuatro casos positivos en una residencia de discapacidad de la Comunidad foral, usuarios que están cursando la enfermedad de manera asintomática.
En cuanto a los profesionales de estos centros sociosanitarios, hay 28 casos positivos entre profesionales de las residencias de mayores, 15 con síntomas y 13 asintomáticos; mientras que en los centros de discapacidad hay 15 trabajadores con Covid-19, 10 con síntomas y cinco asintomáticos.
Maeztu ha hecho una valoración "buena" de la situación en los centros residenciales y ha resaltado que, en estos momentos, hay 32 casos de 7.000 plazas. Así, ha subrayado que "la vacunación se ha notado" en estos centros sociosanitarios.
Ha explicado que "en la medida en que se incrementa la positividad en la comunidad, acaba afectando a los centros puesto que la inmunidad de las vacunas no es total". "Afortunadamente la mayoría está cursando la enfermedad sin síntomas y la evolución es buena", ha expresado la consejera que ha subrayado que "de momento no contemplamos ninguna medida adicional en estos centros".
Mari Carmen Maeztu ha remarcado que la incidencia es "muy baja" y ha subrayado que "suspender las visitas tiene consecuencias también en las personas; tanto física como psicológicamente, todas las personas necesitamos el contacto y afecto de las personas que nos quieren y hacer esas visitas es fundamental". Así, ha insistido que, en el actual contexto de vacunación y con las medidas adoptadas en los centros "no estamos en la situación de tomar ese tipo de decisiones".
No obstante, ha destacado que hay un "contacto permanente con los centros residenciales y hemos incidido en que se extremen todavía más las medidas preventivas para evitar al máximo los contagios, en la medida en que la situación comunitaria vaya mejorando".