El artista Mickey Wilson ha realizado su mejor, y más provindencial, función al no dudar un minuto en escalar la instalación para salvar al hombre.
Colgado del cuello. Así quedó un esquiador que esta semana pasó unos angustiosos minutos atrapado en un telesilla de la estación de esquí de Arapahoe, en Colorado, en Estados Unidos. Finalmente el hombre puede contar su historia gracias a un angustioso rescate.
El esquiador se había resbalado del telesilla y había quedado colgado con las correas de la mochila enroscadas alrededor de su cuello. Su cuerpo tendía a una altura de unos tres metros sobre la pendiente.
El operador del telesilla, consciente de la situación, paró el telesilla, mientras que varios esquiadores, debajo de la víctima, intentaban crear una pirámide humana para llegar a cogerle.
El funambulista Mickey Wilson, que se gana la vida subido en las alturas realizando sus espectáculos de equilibrismo, no dudó ni un segundo en intentar salvar la vida del esquiador.
Wilson subió a una de las torres de la instalación y atravesó los cables tensos que conectan los telesillas para llegar hasta el lugar en el que había quedado tendida la víctima de este suceso. Con un cuchillo consiguió cortar las correas de la mochila.
El esquiador cayó sobre la nieve, que amortiguó el golpe, y fue atendido rápidamente por asistencias sanitarias. Ahora el salvador de esta historia ha compartido a través de su cuenta en Instagram el vídeo que muestra su mejor, y más provindencial, función: la que permite seguir viviendo a la víctima de este terrible suceso.
