La Policía Nacional ha detenido a un hombre por agredir y secuestrar durante varias horas a su expareja, que estaba embarazada de él, cuando se dirigía a una clínica para abortar, ha informado a Europa Press una portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
La víctima había mantenido una relación hasta hace pocas semanas con el arrestado, pero la mujer se separó de él por sus malos tratos. De hecho, tenía ya antecedentes por violencia de género y ella tuvo que cambiarse de casa para evitarle, aunque el acaso continuaba.
Este lunes sobre las 16 horas, cuando la mujer acudía a una clínica para abortar, situada en el número 135 de la calle Toledo, el ahora detenido la interceptó en el camino y ambos mantuvieron una fuerte discusión, ya que él no quería que abortara. Ante la negativa de la mujer, el agresor la introdujo a la fuerza en una furgoneta, llevándola a un polígono industrial, donde la retuvo contra su voluntad toda la mañana.
Además, rompió toda su documentación y pruebas médicas, por lo que impidió el aborto. También le quitó el móvil y el bolso para impedir que avisara a la Policía. Tras varias horas de súplica, el varón accede a llevarle a la clínica, cuyos médicos tras conocer lo ocurrido llamaron a la Policía, que se personó rápidamente en el lugar.
Allí detuvieron a la expareja, acusado de un delito de malos tratos y de detención ilegal. Se trata de un ciudadano español de 30 años. Ella es peruana y tiene 40 años, han indicado las mismas fuentes.
