Pamplona ha rozado su récord histórico de temperaturas extremas este domingo 17 de agosto, al alcanzar los 42 grados, muy cerca de los 42,3 que marcó el 17 de julio de 2022.
La capital navarra se convirtió así en uno de los puntos más afectados por la ola de calor que ha golpeado a la Comunidad Foral durante los últimos días.
El episodio ha dejado dos jornadas consecutivas, 16 y 17 de agosto, con máximas que situaron a casi diez municipios navarros en valores próximos o superiores a los 40 grados, un ranking que la AEMET ha calificado de “inolvidable”.
La ola de calor ha concluido este lunes con la llegada de tormentas y un notable descenso de temperaturas. En Cáseda ya se han registrado casi 5 litros por metro cuadrado, mientras que en Isaba la máxima ha sido de 34,4 grados, muy lejos de los valores del fin de semana.
Con las precipitaciones, el riesgo de incendio forestal ha bajado en varias zonas de Navarra. La alerta se ha reducido en el área cantábrica y en el Pirineo, aunque se mantiene extrema en puntos del centro y muy alta en algunas zonas del oeste.
