Plantea que la subida de impuestos sea gradual durante cuatro años y aumentar los tramos de renta para las bonificaciones.
La portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona y presidenta del partido, Cristina Ibarrola, ha presentado este miércoles una serie de medidas orientadas a "aliviar la carga fiscal" de los ciudadanos de la capital tras la actualización de la ponencia de valoración de la ciudad, que ha calificado como "catastrazo" del alcalde Joseba Asiron.
En una rueda de prensa, Ibarrola ha advertido de que los ciudadanos "no pueden soportar un nuevo golpe a sus bolsillos para financiar los costes de la incompetencia de gobiernos de Bildu y PSN". Ha destacado que "más impuestos no significan mejores servicios", poniendo como ejemplo la situación del sistema sanitario público.
Según ha explicado, la ponencia de valoración revela una diferencia del 90,79% entre el valor actual y el valor catastral aplicado hasta ahora, lo que va a producir "una brusca subida de impuestos" en Pamplona. Como ejemplo, ha afirmado que en el Casco Viejo se pasará de una contribución de 399,70 euros a 618,90. "El Ayuntamiento va a sangrar a los vecinos de Pamplona y va a recaudar la friolera de 10 millones de euros más" con este incremento, ha criticado.
Por ello, ha demandado al Gobierno municipal que "mitigue el impacto de este catastrazo" de manera que esta subida se realice de forma gradual un 25% cada año en los próximos cuatro ejercicios. "Si no se hace es porque no quieren hacerlo porque prefieren seguir sangrando a impuestos en vez de recabar impuestos por otras vías" como la Carta de Capitalidad, ha destacado Ibarrola, que ha cifrado en 30 millones el dinero que el Consistorio habría recibido los últimos tres años gracias a la capitalidad.
Según ha afirmado, la propuesta del Gobierno municipal supone incrementar la contribución en 40 millones de euros y, con la propuesta de UPN, "los ciudadanos se ahorrarían 15 millones". Dinero que "servirá para activar la economía y dar un respiro a la ciudadanía", ha remarcado Ibarrola, que ha insistido en que "simplemente hay que tener voluntad". Ha advertido, además, de que esta subida va a afectar a los ciudadanos "más vulnerables" que viven en alquiler ya que los propietarios "incrementarán el precio de los arrendamientos".
Por otro lado, los regionalistas han presentado una enmiendas a las ordenanzas fiscales de Pamplona para aumentar los tramos de renta susceptibles de recibir una bonificación en el pago de la contribución, contempladas por la Ley de Haciendas Locales y que alcanza un máximo del 90% a las familias con una renta cuatro veces el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), casi 60.000 euros.
No obstante, Ibarrola ha precisado que es el Ayuntamiento quien decide estas bonificaciones y los tramos y, según el planteamiento de Pamplona, "son muy pocas las personas" que van a acceder a la bonificación máxima del 90%, "quienes cobren menos de 15.000 euros". Por eso, UPN propone aumentar los tramos de manera que la bonificación máxima se conceda a las familias con rentas equivalentes al SMI; del 60% al 70% para quienes cobren entre uno y dos veces el SMI; del 20 al 50% para rentas entre dos y tres veces el SMI; y del 10% al 30% para rentas entre tres y cuatro veces el SMI.
En tercer lugar, UPN apuesta por reducir el impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana (plusvalias) al 8%, el "mínimo que contempla la ley", en vez del 17% que plantea el Consistorio.
En esta línea, la formación ha compartido que se bonifique a quien alquiler su vivienda vacía pero ha rechazado que se "penalice" a quien "libremente no quiere hacerlo". Por eso, plantea modificar las ordenanzas fiscales para que las viviendas vacías paguen "la misma contribución que el resto". Según ha indicado Ibarrola, la ley permite un gravamen para estos inmuebles que va entre el 0,25% y el 0,5% el primer año; entre el 0,5% y el 1% el segundo año; y el 1,5% para el tercer año y sucesivas. En caso de Pamplona, ha dicho, se está aplicando "los máximos".
En quinto y último lugar, los regionalistas piden que se "congele" el valor catastral de los inmuebles a fecha de 30 de septiembre a efectos de calcular la cuota variable de residuos. Ya que, con la actualización de la ponencia de valoración, se va a experimentar un "aumento desproporcionado" de esta cuota. Además, UPN pide que la facturación sea mensual, que se haga un seguimiento de los "costes reales" del servicio de recogida y tratamiento de residuos para "ajustar esa tasa sólo cuando el coste del servicio así lo justifique", y que se haga una revisión "exhaustiva de la incidencia que tiene la revisión catastral en las tasas municipales".
