El vicepresidente del Gobierno Foral, Javier Remírez, ha sostenido que el anterior el Ejecutivo navarro, el presidido por Uxue Barkos, respetó la "institucionalidad de Navarra".
Unas palabras que contradicen lo que los socialistas han venido defendiendo durante estos pasados años en los que el Gobierno nacionalista ha tratado de imponer la bandera vasca en diferentes instituciones y su pretensión ha sido la de que el País Vasco fagocitase a la Comunidad foral.
Precisamente, estas declaraciones han surgido después de que los periodistas preguntaran al vicepresidente Remírez por las palabras de su homóloga en el Gobierno central. Carmen Calvo sentenció durante una rueda de prensa que el anterior Ejecutivo, con el que ahora comparten sillones en Navarra, "no era foralista".
Remírez ha señalado que como Gobierno no iba a entrar a calificar al anterior, pero ha dejado claro que "hubo respeto a la institucionalidad de Navarra", que no hubo "ningún tipo de problema".
Por otra parte, al ser cuestionado por las críticas de Navarra Suma a los informes técnicos del Gobierno a sus iniciativas legislativas sobre el mapa local y la ley de Símbolos, ha comentado que "lógicamente" deben tener "coherencia" con el acuerdo programático y, por tanto, las cuestiones que no lo respeten "tendrán alguna respuesta".
Al respecto ha reconocido que el Ejecutivo traslada a los técnicos su acuerdo programático a la hora de realizar informes a las diferentes iniciativas legislativas.
Además, el vicepresidente ha indicado que el Gobierno continúa trabajando en la elaboración de los presupuestos, respetando el calendario con el horizonte de enero del año que viene. La próxima decisión será fijar el techo de gasto y en eso se está trabajando en Hacienda, ha indicado.
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