Son los objetos más robados durante las fiestas de San Fermín y uno de los quebraderos de cabeza, tanto de la policía como de los propietarios cuando comprueban que se lo han robado.
La Policía Foral ha anunciado que ha recuperado 43 teléfonos móviles de alta gama en una localidad de Tierra Estella, robados durante los Sanfermines. Los dispositivos fueron localizados gracias al geoposicionamiento de uno de ellos. Tres personas, miembros de un grupo organizado, fueron detenidas y posteriormente puestas en libertad por la autoridad judicial.
La operación comenzó el 8 de julio cuando uno de los móviles robados fue localizado mediante geoposicionamiento en una casa rural de Tierra Estella, donde los ladrones se habían instalado.
Patrullas de la comisaría de Estella vigilaron la vivienda hasta que los sospechosos fueron identificados con sus pertenencias al abandonar el lugar. En ese momento, descubrieron 43 teléfonos móviles envueltos en papel de plata, una técnica conocida como “jaula de Faraday” para evitar la conexión a la red y dificultar el rastreo. Durante la detención, dos mujeres y un hombre fueron arrestados por delitos de hurto, desobediencia, resistencia y atentado, ya que intentaron huir y acometieron contra los agentes.
La investigación fue llevada a cabo por el Grupo de Policía Judicial de Estella, que trasladó el atestado a la Brigada de Delitos Económicos y contra el Patrimonio de Pamplona. Este grupo se encargó de averiguar la identidad de los titulares de los móviles. Hasta el momento, se han confirmado denuncias interpuestas en la Policía Foral, Policía Municipal de Pamplona, Mossos d'Esquadra, Guardia Civil, Ertzaintza, Cuerpo Nacional de Policía y Gendarmería, contactando con 23 propietarios en España y Francia, con la intención de devolver todos los teléfonos.
Es notable que 40 de los móviles recuperados eran modelos iPhone y que más de la mitad pertenecían a mujeres, ya que los ladrones tienden a evitar a hombres que podrían enfrentar resistencia.
La "jaula de Faraday" es una técnica que consiste en envolver un objeto en un material conductor, como papel de aluminio, para bloquear los campos electromagnéticos externos. En este caso, los ladrones envolvieron los teléfonos móviles en papel de plata para crear una jaula de Faraday y así evitar que los dispositivos se conectaran a la red y pudieran ser rastreados mediante geoposicionamiento.
El principio de la jaula de Faraday se basa en el fenómeno físico de que un conductor eléctrico distribuye las cargas eléctricas de tal manera que el campo eléctrico dentro de la jaula es nulo. Esto es efectivo para bloquear señales de radiofrecuencia, incluyendo las utilizadas por sistemas de rastreo GPS y otras formas de comunicación inalámbrica, protegiendo los dispositivos dentro de la jaula de ser detectados remotamente.
Esto es lo que los ladrones
