La Red Navarra contra la Pobreza y la Exclusión Social advierte de que “en la expansión de la pandemia no solo intervienen factores biológicos, sino también sociales” y por ello “revertir la disparidad es urgente” para frena la "sindemia", según su presidente, Alberto Urteaga.
Se trata de un concepto con alude a la interacción entre factores biológicos y sociales en la expansión de enfermedades, y en esta pandemia la Red considera que las personas en situación de exclusión social y pobreza son uno de los colectivos “más invisibilizados y más afectados desde el comienzo del estado de alarma”.
Por esta razón, ha elaborado un informe que “fotografía” las necesidades de estas personas frente al coronavirus, un dossier que refleja la “multidimensionalidad de la exclusión social” no solo en quien la sufre sino también en cómo atajarla.
La Red pide por ello “una respuesta integral por parte del conjunto de la administración pública” y que “cada departamento aborde sus necesidades específicas en la lucha contra la inequidad social para dar una respuesta eficiente a estas situaciones”.
También, de cara a la aprobación de los presupuestos para Navarra de 2021, han pedido un “compromiso valiente del Gobierno que se refleje en dotaciones presupuestarias para abordar la crisis social” que, han alertado, “ahora mismo está lejos de ser superada”.
Entre las necesidades y mayores problemas encontrados en este estudio entre las personas en situación de pobreza o exclusión social durante la pandemia se encuentran brechas digitales, de acceso a ayudas, en materia de vivienda, en el ámbito educativo y en la atención a la salud.
MAYORES PROBLEMAS
En cuanto a la brecha digital, Lydia Almirantearena, miembro de la comisión permanente de la Red, ha señalado que la atención telemática de los trámites “ha complicado muchísimo la vida” de estas personas, puesto que se han visto “sin medios y sin competencias” para la tramitación de “ayudas sociales, desempleo o alquiler de vivienda”.
En educación, Almirantearena ha señalado que “las costuras del sistema educativo se están rompiendo” y ha urgido a abordar el asunto “para detener el creciente absentismo, que es un problema importante”, así como a “fortalecer medidas de apoyo y articular herramientas que acompañen a los menores”.
Ha pedido asimisimo evaluar “el impacto emocional” que ha tenido la crisis del coronavirus en los menores, “que ha podido ser importante”, y ha reclamado un diagnóstico para “tener previsión de cara a un futuro, en vista de que la situación va para tiempo”.
En cuanto al empleo, la Red solicita medidas de acompañamiento social para la inserción laboral, “una herramienta que se ha mostrado muy eficaz para superar situaciones de exclusión social”.
Ha apuntado además a un colectivo “especialmente vulnerable, y cuya situación se ha revelado cruda”, como es el de las trabajadoras del hogar, sobre quienes ha pedido “ampliar la protección, ya que están sujetas a un régimen especial que les excluye de derechos básicos”.
Asimismo pide la gratuidad de las mascarillas para personas vulnerables que, aunque fue una medida ya implementada por Salud resultó a su juicio insuficiente “porque no se llegó a cubrir a la sociedad en exclusión”, siendo ésta del 7% del total de Navarra, y de hecho han calculado que solo un 1,5% de la ciudadanía tiene acceso al reparto de mascarillas gratis.
En este sentido han destacado que éste es un factor que “refleja las desigualdades entre personas que se lo pueden permitir y quienes no” ya que supone “un gasto familiar de entre 70 y 115 euros al mes” y hay familias “que deben elegir entre usar mascarillas o dedicar sus ingresos a otros bienes”.
Entre las medidas sanitarias también han instado a fortalecer el sistema de Salud Mental porque “las demandas de este servicio se han disparado” y eso requiere de “un refuerzo del área tanto en prevención como en atención”.
Por último la Red solicita mejoras en materia de vivienda para evitar hacinamientos y una mayor oferta pública de alquiler para garantizar el acceso a la misma, y en materia penitenciaria urge a “culminar" el traspaso a Navarra de las competencias en materia de sanidad penitenciaria para "garantizar los elementos de protección de la salud”.
