En Arguedas, el rugido de las vacas en el Encierro del Estrecho no es solo una tradición: es el latido de un pueblo que ha visto cómo el turismo se dispara y el orgullo local se consolida. Tras un año con más visitantes que nunca, el Ayuntamiento ha confirmado que solicitará la declaración de Bien de Interés Turístico para su encierro más emblemático, una carrera tan singular como el paisaje que la rodea.
El balance turístico de 2025 ha sido “muy positivo”, con un crecimiento constante en los viajes motivados por la naturaleza, la cultura y el deporte al aire libre. “Arguedas está consolidando un modelo diverso y sostenible, donde naturaleza, cultura y comercio local funcionan como un mismo ecosistema”, ha señalado el alcalde José Luis Sanz. El objetivo, añade, es “proteger una tradición única y proyectarla como atractivo de calidad”.
La localidad ribera ha sabido aprovechar su papel como “puerta de las Bardenas”, conectando mejor su oferta local con los flujos turísticos que cada año atrae el parque natural. Desde hace meses, el Ayuntamiento trabaja en una estrategia global de producto, experiencia y promoción, con resultados visibles en la ocupación hotelera y el consumo local.
Entre las actuaciones más destacadas figura un plan integral de apoyo al comercio, con medidas para modernizar espacios y señalizar mejor los accesos. También se ha impulsado la movilidad ciclista, una app con vales de descuento para incentivar las compras de proximidad y un programa de experiencias para que el visitante prolongue su estancia en el casco urbano.
El municipio ha estrenado además nuevas infraestructuras que refuerzan su identidad turística. En el Yugo, el observatorio estelar forma ya parte de la Red de Parajes Starlight, mientras que en el Soto de Arguedas se ha habilitado un área de descanso temática dedicada al arroz, dentro del proyecto del Corredor Verde. Otro hito será la futura Escuela-Museo de Bardenas, incluida en el complejo “Arguedas Puerta de las Bardenas”, que busca consolidar la localidad como centro de interpretación del desierto navarro.
El patrimonio y la cultura también han ganado protagonismo este año. El estreno del documental sobre el municipio y la apertura de la Casa-Museo Universo Ticiano, concebida como un museo vivo, amplían los motivos de visita. Además, se trabaja en la rehabilitación de cinco cuevas del Bordón, que acogerán contenidos culturales e interpretativos vinculados al modo de vida tradicional de la zona.
En el ámbito de alojamientos, Arguedas ha dado un salto de calidad con la apertura de Alma Dezerto Bardenas, la primera casa rural de cinco estrellas de Navarra. Este alojamiento ha elevado el estándar de la estancia en la Ribera, reforzando la imagen del municipio como destino de calidad, con experiencias exclusivas y sostenibles.
El calendario del otoño también llega cargado. El próximo sábado 18 de octubre, el pueblo celebrará el XI Día de la Trashumancia, con recepción de jinetes, almuerzo en el Yugo y bajada de las vacas por el casco urbano, un espectáculo que conecta tradición y paisaje. El evento está organizado por el Ayuntamiento y se ha consolidado como cita esperada por vecinos y visitantes.
Todo ello culmina un año en el que Arguedas ha logrado equilibrar naturaleza, cultura y economía local. La próxima meta: que su Encierro del Estrecho —una carrera en plena naturaleza, única en Navarra— obtenga el reconocimiento que merece. “Cada vez más gente viene a vivirlo; ahora queremos que toda Navarra lo sienta como suyo”, resume el alcalde.