El Primer Ensanche de Pamplona ya cuenta con su primera floristería llamada El Bosquecillo, un lugar donde la creatividad reina y donde también se venden más que flores. Se encuentra en la calle Navas de Tolosa 27 desde el mes de febrero.
La pamplonesa Karmentxu Buldain ha sido quien ha dado color y vida con sus flores a los vecinos de esta zona del centro de Pamplona. Ha estado más de 20 años en Barcelona y de siempre ha trabajado como diseñadora de interiores y gráfica, al principio realizando trabajos más manuales. "Se empezó a perder ese tipo de trabajo cuando entraron los ordenadores. Me cansé de tantas pantallas", detalla la florista que regresó a Pamplona tras la pandemia.
A raíz del Servicio Navarro de Empleo realizó el certificado de profesionalidad impartido en CI Agroforestal para formarse como florista. Vio que era lo suyo así que se lanzó a montar un negocio por su cuenta.
Decidió coger un pequeño local del Primer Ensanche y desde entonces, esta zona cuenta con su única floristería. Para iniciar el proyecto en el local tuvo la ayuda de Elena y Jesús de Arquimia dos arquitectos que entendieron su idea desde cero. "También fue muy importante el apoyo de mi familia y amigos que sin su ayuda física y empuje no lo hubiera conseguido".
Aunque el comienzo no ha sido fácil, como suele ser habitual en quienes deciden emprender. "Además de tener que hacer papeles y todo lo que conlleva, pedí una subvención al Gobierno de Navarra, pero se canceló porque no había fondos. Fue un golpe duro", explica la florista.
Aun así, consiguió sacar las cosas positivas, seguir adelante y abrir en febrero la floristería. Una noticia que ha sentado muy bien en los vecinos y vecinas del Primer Ensanche. "Es gratificante porque ha venido mucha gente a dar las gracias por abrir. Se nota que quieren que funcione el comercio local en Pamplona".
No hace mucho la calle General Chinchilla y toda la zona se urbanizó consiguiendo así dejar un Primer Ensanche más bonito y accesible para todo el mundo. Aun con todo, es una zona poco conocida pero sí de tránsito. Para Karmentxu, es importante tratar de impulsar el comercio de la zona. "Una calle con comercios locales tiene mucho valor y a mi parecer el Ayuntamiento debería impulsarla aún más".
El Primer Ensanche, por el momento, cuenta con comercios de hostelería como Kardamomum, Bambaluna o el bar discoteca Kla-B, entre otros. Cuenta también con otros establecimientos y decenas de oficinas de diferentes empresas.
El Bosquecillo no es una floristería habitual y, además de contar con diferentes tipos de flores, cuenta con otros productos que complementan a las macetas y ramos. "Hay chocolates, botellas de vino o cuadros de artistas locales. Busco cosas que sean especiales y que tengan cierto vínculo con la flor".
Cada ramo, maceta y flor está cuidada al detalle. "Me encanta que esto es muy manual y hay mucha creación en los diferentes ramos", explica la pamplonesa. Las flores las adquiere de almacenes mayoristas de Pamplona que traen las flores generalmente de Holanda y otros sitios. Así, nace un nuevo rincón de la ciudad con vida y un espacio de objetos olvidados por marchitos y de nuevos enfoques que fluirán de forma natural con el tiempo.
Así las cosas, Karmentxu Buldain se ha lanzado en este bonito proyecto en el que busca dar color a Pamplona. "No me esperaba tanta aceptación por parte de la gente, es muy gratificante y ojalá esto siga creciendo". En Instagram y en Facebook (@floresbosquecillo), se puede ver todo el trabajo de la floristería.
