Navarra está atravesando un período de estabilidad meteorológica favorecido por la situación anticiclónica, que ha propiciado y propiciará cielos despejados y temperaturas suaves a lo largo de esta semana. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) advierte que hacia finales de la semana se registrará un cambio significativo con la llegada de una masa de aire frío que hará que las temperaturas desciendan de manera considerable.
Este martes 4 de febrero, el día ha comenzado con cielos poco nubosos o despejados. Las temperaturas mínimas han descendido ligeramente, mientras que las máximas aumentarán, salvo en el Ebro, donde experimentarán un leve descenso. Las heladas débiles han sido notorias, especialmente en las zonas más altas de la comunidad.
Para mañana miércoles 5 de febrero, se espera que los cielos continúen despejados, aunque con intervalos de nubes bajas durante la madrugada. La presencia de brumas y bancos de niebla será más probable en el norte y noroeste. Las temperaturas mínimas seguirán ascendiendo de forma ligera, mientras que las máximas aumentarán ligeramente en la Ribera, pero descenderán en el norte y noroeste. Las heladas, aunque débiles, persistirán en el Pirineo, con algunas zonas de cumbres que podrían registrar heladas moderadas. Los vientos serán flojos, con predominio del norte y noroeste.
El jueves 6 de febrero, la previsión apunta a cielos poco nubosos con intervalos de nubes bajas que aumentarán a nubosos al final del día. Se espera la formación de brumas y nieblas matinales, especialmente en el noroeste. Las temperaturas se mantendrán con ligeros cambios, y se registrarán heladas débiles en el noreste y en las cumbres del Pirineo, donde localmente podrían ser moderadas. Los vientos seguirán siendo flojos del norte y noroeste.
El viernes 7 de febrero marcará un giro importante en las condiciones meteorológicas. Los cielos estarán nubosos o cubiertos, con intervalos de nubes que darán paso a más nubes a medida que avance el día. La presencia de brumas y nieblas será más probable en el tercio norte de la comunidad. Las temperaturas mínimas experimentarán un descenso, que será más notable en el norte y noroeste. Las máximas también caerán, con un descenso significativo en el noreste. Se prevé un recrudecimiento del frío, con heladas débiles generalizadas y moderadas en las cumbres del Pirineo.
En cuanto a las temperaturas previstas para este viernes 7 de febrero, se espera que en Estella oscilen entre -1 y 7 grados, en Pamplona entre -3 y 6 grados, en Roncal entre -6 y 5 grados, y en Tudela entre -1 y 8 grados.
Este cambio brusco de temperaturas implica un periodo de heladas que afectará a casi toda Navarra, por lo que desde la AEMET recomiendan precaución, especialmente en las primeras horas del día, cuando las temperaturas más bajas podrían generar problemas en las carreteras y en la agricultura.
