El Ayuntamiento de Pamplona ha detectado graves fallos en el sistema de cámaras que controlan el acceso en coche al Casco Viejo, lo que ha dejado sin datos a la plataforma municipal durante 148 días en el último año y medio. En ese tiempo, el corazón de la ciudad ha estado sin control efectivo del tráfico, sin registrar entradas ni salidas de vehículos.
Según los informes técnicos, los fallos se produjeron en tres periodos prolongados: entre el 18 de abril y el 23 de mayo de 2024 (36 días), del 20 de agosto al 4 de noviembre de 2024 (77 días) y del 10 de enero al 13 de febrero de 2025. En total, las cámaras permanecieron inactivas casi cinco meses, lo que supone el 19 % del tiempo total de funcionamiento del sistema.
La empresa pública ANIMSA, responsable de la licitación del contrato, ha iniciado un proceso sancionador contra la UTE Abertis Mobility Services i3i, adjudicataria del sistema, y ha decidido retener parte de la fianza como consecuencia de los incumplimientos detectados.
El consistorio pretende ahora adjudicar un nuevo contrato de mantenimiento para ampliar la cobertura y garantizar la fiabilidad del sistema. La propuesta inicial de la UTE no alcanzaba todos los requisitos técnicos necesarios y el contrato vigente, con una garantía de cinco años, ha demostrado carencias en la gestión y monitorización.
El protocolo de mantenimiento actual establece la monitorización continua de la plataforma, el mantenimiento correctivo y la sustitución de equipos dañados, además de revisiones semanales del software. También prevé atención a incidencias de lunes a viernes, de 9 a 17 horas, con un tiempo máximo de respuesta de 48 horas (o 73 horas si se comunica en viernes).
Sin embargo, los prolongados periodos sin datos han puesto de manifiesto que las cámaras del Casco Viejo de Pamplona no están cumpliendo su función, lo que ha obligado al Ayuntamiento a tomar medidas para recuperar el control del tráfico en una de las zonas más sensibles de la ciudad.
