Las piscinas exteriores del Complejo Deportivo Aranzadi han cerrado temporalmente tras detectarse un problema de cloración en el agua y la aparición de bacterias pseudomonas.
La medida afecta a las dos piscinas de nado y a la de chapoteo, y podría prolongarse hasta el próximo miércoles, aunque el Ayuntamiento ha señalado que, si la situación se resuelve antes y se garantiza la seguridad, las instalaciones volverán a abrirse al público.
El cierre se ha decretado después de recibir los resultados del último control periódico de la calidad del agua, realizado este martes. En las pruebas se ha confirmado una carencia de cloro que ha favorecido la proliferación de pseudomonas, unas bacterias resistentes al desinfectante que pueden causar problemas de salud como conjuntivitis, erupciones cutáneas, otitis externa e infecciones respiratorias y urinarias, especialmente en personas con las defensas más bajas.
Para resolver la incidencia, las piscinas serán vaciadas por completo y sometidas a un proceso de limpieza y desinfección, que incluirá tanto los vasos como las tuberías y las bombas de agua. Posteriormente, se llevará a cabo un tratamiento de hipercloración con el objetivo de eliminar cualquier resto microbiológico detectado.
Una vez finalizado el proceso, se procederá al llenado de los vasos y se repetirá un análisis completo de la calidad del agua. Solo tras confirmarse que los valores cumplen con la normativa sanitaria vigente, se permitirá la reapertura de las piscinas exteriores del Complejo Deportivo Aranzadi.