La consejera de Interior vaticina que no podrá aprobarse una ley que regule las policías navarras en los próximos años.
La consejera de Interior, María José Beaumont, ha asegurado que no va a dimitir tras el rechazo de su proyecto de Ley de Policías de Navarra, al tiempo que ha avanzado que no va a haber nuevas propuestas por parte del Ejecutivo en esta materia.
"Tengo absolutamente claro que no voy a dimitir salvo que se dé la pérdida de confianza de quien me propuso que fue EH Bildu y de quien me designó que fue Uxue Barkos", ha aseverado en declaraciones a los periodistas tras la aprobación de una enmienda a la totalidad que ha supuesto la devolución al Gobierno del proyecto de ley de Policías que había propuesto y defendido.
El proyecto de ley foral de las Policías de Navarra ha sido devuelto al Gobierno al sumarse al rechazo de la oposición el de dos de sus socios, Podemos e I-E, que han apoyado su retirada al no contar con el apoyo de la mayoría sindical.
La consejera ha reconocido que, "a pesar de las dificultades, confiaba en que se pusiera encima de la mesa la racionalidad", pero tras este pleno, a su juicio, "ha ganado la irracionalidad", por lo que ha sostenido que su valoración no puede ser más que negativa.
Ha reiterado que la devolución del texto "no solo significa una bofetada a la sociedad como dijo la presidenta, sino que supone una pérdida de oportunidad". Al respecto ha añadido que "está muy claro" que, al menos en lo que resta de legislatura no va a haber nadie, al menos ella no, que vaya a dedicar "tanto tiempo como se ha dedicado" a un proyecto que se ha encontrado con "tanta piedra en el camino".
BEAUMONT NO PRESENTARÁ UN NUEVO PROYECTO DE LEY
Ha lamentado que "los mayores paganos de esta situación son los propios agentes de la Policía Foral y local". Por ellos siente lo que ha pasado, ha dicho, tras lo que ha reprochado que algunos, sin especificar quién, "quizás tenían que haber adivinado que algunas de sus posiciones imposibles podían suponer lo que ha ocurrido hoy".
"Tienen que pisar tierra y valorar que esté quien esté hay cosas que son imposibles", ha aseverado, para señalar a continuación que "a lo mejor los tiempos cambian y son posibles en otros tiempos" pero a día de hoy y en años próximos no ve que las cosas puedan resolverse.
El "drama", en su opinión, es que "continúa vigente la ley de 2015", que va a conllevar "el abandono" de servicios que la Policía Foral está prestando ahora mediante el pago de horas extraordinarias, algo que querían evitar con esta herramienta. Asegura la consejera que cuando la Policía Foral no pueda prestar determinados servicios, lo harán público para que la ciudadanía sepa la razón y "quién tiene la culpa de que eso sea así".
Tras afirmar que no va a presentar nuevas propuestas, ha confirmado que el Plan de Director de la Policía se debatirá en el Parlamento, habrá propuestas de resolución consecuentes a ese debate y ahí se podrá ver si se producen contradicciones entre lo que resuelva la mayoría y lo sucedido este jueves.
