Mientras sus socios insultan y acosan a partidos de derechas en Navarra, Chivite y su director de Paz y Convivencia callan de manera sepulcral, incapaces de condenar el ataque a partidos democráticos.
Este fin de semana, Navarra vivió dos nuevos episodios de la violencia habitual de la izquierda abertzale, los aliados de María Chivite y el PSOE para permanecer en el Gobierno.
En el primero de los casos, difundieron un panfleto con la imagen de Alejandro Toquero, alcalde de Tudela por Navarra Suma, caricaturizado como si fuera Hitler. Cargos públicos de EH Bildu en Navarra, parlamentarios y concejales, se han encargado de darle la máxima difusión, con el silencio cómplice del Gobierno de Navarra.
Según ha podido conocer este periódico, nadie de la dirección de Paz, Convivencia y Derechos Humanos del Gobierno de Navarra que dirige el socialista Martín Zabalza Arregui se ha molestado en contactar con Toquero para condenar lo ocurrido o solidarizarse con él. Tampoco se han pronunciado de manera pública desde este departamento para pronunciarse sobre el acoso al alcalde de la segunda ciudad de Navarra.
Como prueba de la actitud del PSN, el líder del partido en Tudela, Ángel Sanz, ha atacado a Toquero por "hacerse la víctima" ante la aparición de la imagen en la que lo comparan con Hitler, sin mostrar ni siquiera un ápice de empatía ante un ataque tan alejado de los valores de la democracia.
En el segundo de los casos, un grupo de radicales atacó en Estella un puesto informativo del partido Vox Navarra, con agresión a su vicepresidenta incluida. Tampoco este hecho merece mención alguna para el Gobierno de María Chivite, que parece que ve con buenos ojos la violencia y la agresión contra los partidos de la oposición.
Hay que recordar que María Chivite gobierna con los cómplices de ETA, con los que pretendía aprobar un Plan de Convivencia en Navarra sin ni siquiera exigirles la condena expresa de los cientos de crímenes de la banda terrorista vasca y mientras mira para otro lado ante el permanente acoso, insultos y ataques a partidos de la oposición.
UN FRACASO ESPERADO
Este mismo martes, el Gobierno foral ha sido incapaz de aprobar en el Parlamento su I Plan Estratégico de Convivencia de Navarra 2021-24, al obtener sólo los votos a favor de PSN, Geroa Bai, Podemos e I-E.
Navarra Suma había planteado incluir al plan una propuesta para exigir la condena a ETA y el rechazo a acuerdos con las formaciones políticas que no condenen a la banda terrorista. El PSN ha presentado una alternativa a este planteamiento, proponiendo la "necesidad de condenar cualquier tipo de terrorismo y específicamente el de ETA por parte de todas las fuerzas políticas", pero sin mención al rechazo de acuerdos con quienes no condenen a ETA.
Esta propuesta del PSN ha salido adelante con el apoyo de todos los grupos, salvo de EH Bildu. La introducción de esta frase ha supuesto que EH Bildu se posicione en contra del plan. A su vez, aunque Navarra Suma ha aprobado la propuesta del PSN, la ha considerado insuficiente para apoyar el conjunto del plan.
El presidente de UPN y portavoz de Navarra Suma, Javier Esparza, ha afirmado que “queda claro que Chivite se sustenta en una formación incapaz de condenar a ETA”. Esparza se ha manifestado así tras el rechazo del Parlamento al Plan de Convivencia del Gobierno de Navarra.
“Ya habíamos advertido que es imposible mejorar la convivencia en Navarra de la mano de EH Bildu y hoy se ha evidenciado”, ha afirmado el portavoz de la coalición de UPN, Ciudadanos y PP. Para Esparza, “los que han roto la convivencia en Navarra son incapaces de dar un solo paso para reconstruirla, y eso debería hacer reflexionar al PSN porque es evidente que tiene de socio a quienes siguen justificando la violencia terrorista”.
“Se demuestra que cuando Chivite decía que EH Bildu estaba dando pasos no era cierto. Bildu no se ha movido de donde siempre ha estado”, ha dicho Javier Esparza. “Hace unas semanas vimos cómo Bildu incorporaba a la dirección estratégica al último jefe de ETA, David Pla. Hoy hemos visto cómo sigue negándose a condenar a ETA. Por eso no se les puede normalizar ni blanquear como pretende el partido socialista”, ha añadido.
Por último, Esparza ha reprochado a Chivite que se haya beneficiado de los votos de Bildu para acceder de la presidencia de Navarra: “Es inaceptable e incomprensible desde un punto de vista ético”.
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