La presidenta de UPN reclama transparencia, recursos y garantías para evitar sobreocupación y problemas de convivencia tras la llegada de menores extranjeros.
La presidenta de UPN, Cristina Ibarrola, ha acusado este miércoles al Gobierno foral de provocar "inquietud" en la población ante el futuro reparto de menores extranjeros no acompañados, al considerar que la gestión del COA de Marcilla ha sido "caótica".
Según ha señalado, esa situación ha derivado en que "otros municipios y parte de la ciudadanía sean reticentes ante la llegada de 118 menores a lo largo del próximo año". Ibarrola ha añadido que la falta de transparencia del Gobierno central "ha incrementado la desconfianza", al no aclarar ni justificar las cifras del reparto.
La líder de UPN ha exigido a la consejera de Derechos Sociales, Carmen Maeztu, que explique "dónde van a alojar a los menores" y que garantice que no se repetirán situaciones de sobrecapacidad como las ocurridas en Marcilla. Ha advertido de que, incluso con la apertura de nuevos recursos, "parece materialmente imposible que no vuelva a producirse sobreocupación en alguno de los centros".
Además, Ibarrola ha pedido que el Ejecutivo foral detalle el coste económico total del dispositivo y qué parte quedará cubierta por los 3,2 millones de euros que aportará el Estado. También ha reclamado recursos adicionales para asegurar el "adecuado acompañamiento e integración" de los menores y medidas específicas para evitar problemas de convivencia o de seguridad.
Por otra parte, ha criticado que comunidades como Cataluña y País Vasco hayan quedado exentas de acoger más menores, lo que, a su juicio, demuestra que "los criterios del Gobierno se hicieron a medida". Según Ibarrola, esto responde a las "prebendas" que Pedro Sánchez concede a ambos territorios "para mantenerse en el poder".
"Solidaridad, sí, como siempre lo ha sido Navarra, pero con orden, con información y con recursos", ha concluido la presidenta de UPN.
